Meneses se tira el fútbol encima

El penal cobrado por Héctor Jona a favor de la U. de Concepción, tras una simulación de Jean Meneses, reabrió el viejo y perenne debate sobre la pillería o la trampa. Una discusión interminable, casi bizantina, pero que no logra desviar el foco de lo realmente primordial: las consecuencias sobre el actuar del delantero del Campanil.

Porque Meneses confesó tras el partido que cayó en el área no empujado por la falta de Óscar Opazo, sino motivado por la búsqueda de una ventaja. "Jugué con la viveza y me dejé caer", señaló el atacante. Palabras autoincriminatorias que, de acuerdo a la opinión de Ángel Botto, otrora presidente del Tribunal de Disciplina, debieran bastar para sancionarlo de oficio. "Están las imágenes, hay declaraciones suyas, el tribunal debe ver las imágenes y citarlo", asegura el abogado. Y añade: "A mi juicio fue una simulación grave, con eso viola el principio de ética deportiva y el fair play". La eventual sanción, de acuerdo al exdirigente, "no debiera ser más de uno o dos partidos".

Pablo Pozo, anterior presidente de la Comisión de Árbitros, avala los castigos retroactivos puesto que "es la única forma de terminar con estas prácticas". "Obviamente hay error del árbitro, una mala apreciación, pero el jugador lo induce al error y en las imágenes se ve que finge la falta", comenta Pozo. Él mismo fue protagonista en una de las suspensiones más icónicas del fútbol chileno, cuando en 2008 cobró penal a favor de Colo Colo luego de que Lucas Barrios simulara el foul ante Cobreloa en Calama. No obstante, días más tarde la institución disciplinaria revirtió el cobro y castigó a la Pantera por un partido.

Enrique Osses, quien en la actualidad preside el comité que reúne a los árbitros nacionales, es claro en indicarle a La Tercera que el "jugador engañó al árbitro, que si bien estaba cerca de la jugada, no evaluó correctamente y sancionó erróneamente un penal. A raíz de esto, se ve reflejado que influimos en el resultado del partido".

Si la simulación de Meneses será incluida en el informe arbitral, el exárbitro clarifica que "no nos corresponde a nosotros informarlo, le corresponde al Tribunal".

Sobre si Jona enfrenta posibles sanciones, Osses aclara que los árbitros son evaluados fecha a fecha, y "se expone a no dirigir, a ser castigado con una sanción de una a cinco fechas, dependiendo de la gravedad de la falta".

Pero, ¿es viveza o trampa? ¿Resulta lícito aprovechar un descuido del árbitro, una visión bloqueada o una regla malinterpretada, para sacar ventajas deportivas? Humberto Chita Cruz es claro en su respuesta. "Es una avivada del jugador, pero los responsables son el árbitro y el guardalíneas, que no estaban encima. El jugador ocupó la picardía del futbolista chileno, siempre ha sido así. Antes no había tecnología, por lo que abundaban las mañas". Eso sí, se muestra a favor del VAR para evitar este tipo de situaciones.

De hecho, una comitiva arbitral chilena visitará Inglaterra, invitada por la FIFA, para ser instruidos en la aplicación de la videoasistencia referil. "No creo que sea imprescindible, pero si es importante contar con la herramienta para evitar los grandes errores", concluye Osses.

José Luis Villanueva, ex delantero de la UC, fue mucho más crítico: "Estoy cansado de la falsedad. No soporto la rotería, en lo que hemos caído como sociedad. No soy duro con Jean, porque hoy es él, pero en el futuro serán otros. Hace un par de años fue Jara, y esto va más allá del fútbol: políticos, empresarios. Con eso soy duro, con el que se beneficie de la trampa. Es el reflejo de una crisis valórica".

El exariete cruzado no negó que en su momento también pecó: "Me hice el vivo. Pero cuando era chico, los más grandes validaban este tipo de conductas y no había nadie, como lo hacemos nosotros ahora, que te dijera cómo son las cosas realmente".

El sindicato de jugadores, a través de Luis Marín, el secretario, se lavó las manos: "No tenemos facultad para castigar". Así que tampoco censuró el comportamiento de su asociado. No quiso referirse más al tema.

En Inglaterra, por ejemplo, el sindicato sí es enérgico en la censura a este tipo de acciones. Y en mayo de 2017, la Premier League instauró un castigo de dos partidos para aquellos que simularan buscando un gol, un penal, o una expulsión. Todos los lunes, un comité compuesto por tres personas - un exjugador, exárbitro y exentrenador- revisa las imágenes de los partidos del fin de semana, y si la decisión es unánime, la Asociación de Fútbol aplica la sanción correspondiente.