"A veces, uno está jugando en un equipo que le gusta, pero de repente te ofrecen irte a Medio Oriente, y uno piensa en la familia, en la estabilidad económica, y se va a jugar para allá no más", dice Eduardo Fuentes para ejemplificar su salida de La Red, en 2013, y su posterior retorno a Canal 13.

Cinco años después, la situación vuelve a dar un giro, porque el animador regresa a la señal ubicada en Quilín, para nuevamente hacerse cargo de Mentiras verdaderas, el que anoche fue conducido por última vez por Ignacio Franzani.

Según relata Fuentes, él y el equipo que hace el programa de entrevistas jamás perdieron el contacto, y siempre hubo ganas de volver a trabajar juntos. "De alguna manera, yo tenía la sensación, o el anhelo, de que terminaría volviendo", confiesa. Eso, aunque asegura que "nunca sentí que fue un error irme a Canal 13, pero si a cada rato me preguntaba si lo estaba haciendo bien o mal. Sin embargo, yo creo que uno tiene que morir con las botas puestas siempre".

Reconoce, además, que esa decisión que tomó en 2013, tuvo que ver con un aspecto monetario, porque "volver al 13 implicaba, en términos económicos, un momento que me permitía tener más relajo para más adelante. Implicaba otras realizaciones más personales, más privadas".

Hoy, la historia es distinta. Dice que sus prioridades cambiaron y que todo se reduce a "privilegiar un lugar en el que me sienta cómodo, a gusto, y solo Mentiras verdaderas me puede hacer sentir tan a gusto. Eso que dicen de que las personas maduran, es verdad".

Su vuelta al espacio, donde quizás logró su mejor desempeño televisivo y que también condujo Jean Philippe Cretton, se concretará los primeros días de marzo, y la idea de Fuentes es seguir más o menos en la misma línea. Sin embargo, explica que ha conversado con el equipo para ver de qué manera se imaginan ellos el Mentiras verdaderas 2018, y ambos puntos de vista están alineados.

"El programa tiene una forma de juego, que nosotros marcamos en su minuto, y que ha tenido acentos y matices. Ahora, nos gustaría acentuar el programa en buenas entrevistas y con un espacio para el humor. El Mentiras verdaderas no puede ser un ladrillo, ni algo tan solemne, a pesar de que tener momentos solemnes. Siento que el humor se había perdido un poco en el último tiempo, lo que para mí es indispensable".

Uno de los momentos con más humor que tuvo el espacio fue con los "viernes sin censura", donde el Profesor Rossa, Guru Guru y Don Carter se hicieron aún más populares. Si existe o no la posibilidad de resucitarlo, Fuentes dice: "Yo, lo que más quisiera es que volvieran los viernes sin censura. Sin embargo, los cinco años que estuve fuera, viajando por el mundo (ríe), Chile cambió, y ahora las cosas están muy sensibles, y por eso hay que tener mucho cuidado. Y si hay cuidado, puede ser censura. Entonces, tenemos que buscar una manera correcta de hacer un viernes sin censura".