Las propuestas de la ecologista Femke Halsema van desde bajar las cortinas de las 330 ventanas existentes hoy para que las prostitutas dejen de estar en exhibición pública hasta clausurar completamente el barrio. En el sindicato local que agrupa a las trabajadoras sexuales, el proyecto no ha sido bien recibido.
Valentina Jofré
4 jul 2019 00:43 PM