Kenneth Roth pretendía exponer en territorio egipcio un informe sobre el desalojo violento de un campamento de protesta de seguidores de los Hermanos Musulmanes en agosto del año pasado.
DPA
11 ago 2014 05:35 AM
Kenneth Roth pretendía exponer en territorio egipcio un informe sobre el desalojo violento de un campamento de protesta de seguidores de los Hermanos Musulmanes en agosto del año pasado.
El director para las Américas, eso sí, dijo que las excepciones son los presidentes Sebastián Piñera y Juan Manuel Santos de Colombia.
Según responsables del Gobierno y medios leales al régimen, las demoliciones son parte de proyectos de planificación urbana y para acabar con las construcciones ilegales.
"Los documentos, células de aislamiento, salas de interrogatorio y herramientas de torturas que hemos visto en los locales de los servicios de seguridad del gobierno corresponden a las denunciadas por ex detenidos desde el inicio de la revuelta en Siria", dijo un funcionario de HRW.
En el informe denominado "La muerte que viene del cielo", la organización indicó que los ataques mataron a más de 4.300 civiles en todo el país desde julio de 2012.
La organización internacional emitió un comunicado tras la muerte de Hugo Chávez. Señaló que en su gobierno hubo una "notable concentración de poder y abierta indiferencia por los derechos humanos fundamentales".
El informe "Los desaparecidos de México: el persistente costo de una crisis" consigna que no se ha podido localizar a las víctimas y los responsables no han sido presentados ante la justicia.
La Fiscalía y los familiares de las víctimas han acusado a la defensa de presentar continuamente alegaciones para ralentizar este macrojuicio en el que han declarado unos 100 de los 500 testigos convocados.
La organización pidió al presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy que exija públicamente al gobierno de Hanoi la liberación de los presos políticos, el respeto a la libertad de religión y la abolición de los trabajos forzados en centros de rehabilitación para toxicómanos.
Human Rights Watch señaló que ha documentado casos de personas que fueron torturadas mientras se encontraban presas de forma irregular.
Human Rigths Watch calificó de abusivas las penas de entre tres y cinco años de prisión para los opositores al régimen por lanzar panfletos frente a la Plaza de la Revolución.
José Miguel Vivanco dijo que "hay dudas respecto de la muerte de un líder en las condiciones que se produjo esa muerte, en pleno bombardeo de La Moneda, y pudiera haber evidencia que demuestre una tesis distinta".
La principal queja de la organización es la dicotomía entre el discurso y las acciones del presidente, sobre todo en materias democráticas y de tortura.
La organización dijo que existen sospechas de que tropas británicas y unidades militares iraquíes bajo su supervisión cometieron "serios abusos" contra civiles y detenidos.