Desde el 8 de agosto el Mando Central de Estados Unidos ha llevado a cabo un total de 68 ataques aéreos en Irak, según indicó el Mando Central de las Fuerzas Armadas estadounidenses.
EFE
18 ago 2014 08:59 AM
Desde el 8 de agosto el Mando Central de Estados Unidos ha llevado a cabo un total de 68 ataques aéreos en Irak, según indicó el Mando Central de las Fuerzas Armadas estadounidenses.
El saliente primer ministro iraquí anunció su salida y dijo que dejaba el puesto para salvaguardar la "unidad" y la "estabilidad" del país.
El grupo Estado Islámico enfrenta en el Kurdistán iraquí la resistencia de soldados con raíces milenarias entrenados por la CIA y ahora abastecidos militarmente por Francia.
"Había que intervenir ahora, antes de que sea demasiado tarde", afirmó el Observador Permanente del Vaticano ante las Naciones Unidas, monseñor Silvano Tomasi.
Cada día que pasa, las condiciones de esos desplazados por los ataques de los jihadistas del Estado Islámico es peor, explicó el organismo.
La formación de un nuevo Gobierno en Irak está pendiente desde las elecciones del pasado abril, mientras Al Maliki permanece en el cargo de forma interina.
La portavoz del departamento de Estado reveló que la cooperación empezó la semana pasada, pero no precisó ni cuántas armas o qué tipo de armamento ha sido enviado.
Además de los sunitas y kurdos cada vez hay más chiitas que exigen que Al Maliki se aparte del poder, porque lo hacen responsable de las victorias de los jihadistas.
La provincia de Nínive, ahora casi en manos del Estado Islámico, era un refugio para todas ellas.
La autorización Obama, para el primer bombardeo aéreo estadounidense tuvo como objetivo baterías de artillería del grupo insurgente que atacaban posiciones kurdas en Erbil.
Estas minorías, acostumbradas a la intolerancia y los prejuicios, ya fueron objeto de persecución por el imperio Otomano, el régimen de Saddam Hussein y los terroristas de Al Qaeda.
Las fuerzas kurdas se han visto obligadas a retirarse de varias zonas de la provincia septentrional de Nínive ante el avance jihadista.
Los jihadistas anunciaron que habían tomado el control del cuartel general en esa ciudad, información que fue confirmada por una fuente militar libia.
Mientras la atención internacional está enfocada en Irak, los jihadistas reinician su ofensiva en Siria y consiguen botín de armas hechas en Estados Unidos y dinero.
Además de culpar a los jihadistas afirmó que fuerzas iraquíes y supuestos combatientes no han tomado precauciones para proteger a las personas de la violencia.