Una comparación mucho más que odiosa: 95% de futbolistas chilenas no recibe 1 peso por jugar

Chile vs Peru
12 de Abril de 2018/LA SERENA Francisca Lara convierte su gol y celebra el tres a cero aprcial durante el partido por la cuarta fecha del Grupo A de Copa America Femenina entre las selecciones de Chile vs Perú jugado en el Estadio La Portada de La Serena FOTO:ALEJANDRO PIZARRO/AGENCIAUNO

Pocas actividades deportivas ofrecen menos recompensas financieras a sus cultores que el fútbol femenino; en Chile, de manera concluyente, mientras que en el resto del mundo, de modo variable, de acuerdo con el nivel de desarrollo de cada país y de si en él existe una liga femenina profesional o no.

El cuestionamiento se encuentra más en boga que nunca: la Selección Femenina de Fútbol logró este domingo lo que la masculina no: clasificar a su respectivo mundial, a realizarse el 2019 en Francia. Las transmisiones televisivas fueron un éxito e incluso se alimentó una discusión profunda en torno a la desigualdad en el deporte y la precariedad con que las mujeres que deciden dedicarse al balón deben lidiar.

La realidad de Chile es impactante. Así lo explica Javiera Moreno, secretaria de la Asociación Nacional de Jugadoras de Fútbol Femenino (Anjuff), quien explica que sólo algunos clubes ofrecen mínimas ayudas financieras a sus futbolistas, mientras que la mayoría aporta con un poco de equipamiento. No son pocos, además, aquellos que se limitan a prestar sólo el nombre para que el grupo de mujeres interesadas en participar en los torneos de ANFP pueda competir.

"Los viáticos o ayudas financieras son muy variables, pero en el caso de las jugadoras chilenas van entre 50 y 80 mil pesos, aproximadamente", dice Moreno.

Si de trata de las extranjeras en la competencia chilena, la situación mejora sólo un poco y en casos muy puntuales, como el de la argentina Estefanía Banini, a quien se le ofrecía alojamiento, alimentación y algo de dinero, que no llegaba a sobrepasar la barrera de los $ 300.000. Quien también recibió un estímulo monetario fue Christiane Endler, pero en montos que jamás iban más allá de los mencionados.

Colombia, que ha asomado como ejemplo de profesionalización de la liga, ofrece montos muy exiguos, apenas superiores a los que reciben las extranjeras en Chile. En ambos casos, la mayoría de las jugadoras lo hacen con la finalidad de ganar experiencia o algo más de figuración; el dinero nunca es la meta, porque, en rigor, no existe para el fútbol femenino en Sudamérica a niveles que se aproximen siquiera a las divisiones de menores categorías en el caso de los varones.

Hay situaciones que parecen increíbles, como las de Universidad Católica, que llegó a cobrar $ 15 mil mensuales a las jugadoras de sus equipos sub 20 y adulto, situación que, por fortuna, concluyó hace un par de años. De cualquier modo, hoy los cruzados aportan equipamiento (por acuerdo con su esponsor oficial), viajes y hotelería (con apoyo de la ANFP) y atención kinesiológica.

En el caso de las seleccionadas, la mayoría proviene de Colo Colo, el club que ha mostrado mayor interés y ha destinado mayores recursos al fútbol femenino, seguido por la U. En estos casos, la relación entre inversión y resultados es absolutamente proporcional, pues las albas han ganado 13 torneos nacionales, salvo los iniciales ante Everton (2008 y 2009) y un par de "islas" en los últimos años gracias a las azules (Apertura 2016) y a Palestino (Clausura 2015), que constituye un verdadero milagro, pues el equipo se mantiene con algunos proyectos autogestionados por su técnico, Claudio Quintilliani, y el grupo de jugadoras.

La situación también se reitera a nivel internacional. Marta, la mejor de la historia, tiene un sueldo de US$ 500 mil anuales, mientras que el de Lionel Messi es de $ 44,5 millones, sin considerar premios por logro. Es decir, 88 veces más que la brasileña.

Llevado al extremo, el análisis se simplifica con el simple hecho de que más de 95% de las futbolistas nacionales no recibe un peso por jugar. Amateurs, como nunca.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.