El ex presidente de Petrobras y del Banco do Brasil, Aldemir Bendine, fue condenado este miércoles a 11 años de prisión por recibir un soborno de tres millones de reales (unos 929.000 dólares) de manos de la constructora Odebrecht. La sentencia firmada por el juez federal Sergio Moro, emblema de la lucha contra la corrupción para muchos brasileños, consideró probados los delitos de corrupción pasiva y lavado de dinero.

"Condeno a Aldemir Bendine (...) por solicitar y recibir tres millones de reales del Grupo Odebrecht de ventaja indebida en razón de su cargo de presidente del Banco do Brasil y presidente de Petrobras", señala el fallo al que accedió AFP.

Bendine, de 54 años, fue detenido preventivamente en julio de 2017. Sus abogados negaron los cargos.

El juez vinculó el pago de sobornos, parte de los cuales sirvieron para financiarle al exfuncionario una estadía en Nueva York, a la reestructuración de una deuda de 1.700 millones de reales que tenía Odebrecht Agroindustrial -una rama del conglomerado- con el Banco do Brasil. Según la sentencia, Bendine solicitó el pago en 2014, cuando aún presidía el banco, que es el mayor de América Latina medido por sus activos, pero recién se efectivó en 2015 cuando ya dirigía la petrolera estatal.

Bendine había llegado a Petrobras con el objetivo de sanearla tras el descubrimiento de la red de corrupción público-privada que la parasitó durante más de una década y le costó más de 2.000 millones de dólares en pérdidas.

"Lo último que se esperaba de él era que se corrompiera, colocando en riesgo nuevamente la reputación de la empresa. La práctica del crimen en el contexto en que estaba inserto fue muy grave y denota una elevada culpabilidad y una personalidad desviada", escribió el magistrado.