La portavoz del Pentágono, Dana White, justificó el ataque llevado a cabo el miércoles en Siria por la coalición internacional liderada por EE.UU. contra tropas favorables al régimen de Bashar Assad por tratarse de una acción "en defensa propia" y aseguró que se mantuvo a Rusia informada.

"Las fuerzas favorables al régimen llevaron a cabo lo que aparentaba ser un ataque combinado contra las tropas de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD) al este del río Éufrates, más allá de la zona de no agresión, por lo que la acción de las fuerzas de la coalición fue en defensa propia", dijo White.

"Los oficiales rusos fueron informados antes, durante y después del ataque", aseveró White, quien no quiso entrar en detalles sobre el número de bajas sufridas por el enemigo durante la acción, que según datos facilitados por el Observatorio Sirio de DD.HH. rondaría los 45 muertos. La BBC, en cambio, situó la cifra en 100.

Este enfrentamiento podría suponer un auténtico dolor de cabeza para el actual equilibrio de intereses en el que se desarrolla la guerra contra el Estado Islámico (EI) en la región, ya que el Ejército estadounidense lidera una coalición internacional en la que participan la FSD y combatientes kurdos, ambos contrarios a Assad.

Por su parte, Rusia apoya al actual régimen y combate a los yihadistas junto al Ejército local, en un área delimitada y separada de las fuerzas de la coalición por una zona de no agresión, que en la provincia nororiental de Deir al Zur está marcada por el cauce del río Éufrates. Además, Assad, que ha dicho que quiere recuperar hasta el último centímetro de Siria, es respaldado por milicias chiitas apoyadas por Irán, según Reuters.

En una carta a la ONU, la Cancillería de Siria describió el ataque como un "crimen de guerra" y llamó al desmantelamiento de la coalición. "Exigimos (que la comunidad internacional) condene esta masacre y responsabilice por ella a la coalición", afirmó el ministerio, según la agencia estatal de noticias siria SANA.