Dónde y qué mirar durante el Día del Patrimonio

Más de 200 inmuebles abrirán a nivel nacional en la versión número 14 de esta celebración.




Hace 14 años que el último domingo de mayo se viene reservando en el calendario de los chilenos para visitar edificios de atractivo arquitectónico e histórico. El año pasado, un total de 300.000 personas visitó los 200 inmuebles que estuvieron abiertos, de norte a sur, por una única vez en el año para el público o, al menos, por una única vez guiados.

En esta jornada del 25 de mayo, seis arquitectos y profesionales ligados al patrimonio recomiendan qué visitar. Son seis lugares, de los menos visitados en años anteriores, pero de gran valor. En el día a día, pasan inadvertidos, porque ya son parte del paisaje. Sin embargo, esconden historias que todo chileno debiera conocer y, por lo mismo, decir que alguna vez los ha visitado.

Una de los beneficios de recorrerlos es que no habrá largas filas. El año pasado por ejemplo, los más concurridos sobrepasaron las 12 mil visitas: El Museo Histórico Nacional (12.700), el de Bellas Artes (12.000), el de Historia Natural (10.000), el Archivo Nacional (9.000), el Palacio de La Moneda (7.300) y el Centro Cultural Palacio de La Moneda.

Para el arquitecto Yves Besancos, una de las oportunidades de este día está en "ampliar el centro histórico", salir del recorrido habitual para conocer un poco más de nuestro patrimonio.

Otras actividades
También habrá otros edificios en Santiago que abran sus puertas en conmemoración del Día del Patrimonio.

La Casa de Moneda, por ejemplo, abrirá excepcionalmente sus puertas para que el público pueda visitar su museo con la historia del dinero en Chile. Además, se podrá ver cómo se acuñan medallas y conocer la onza troy de Casa de Moneda, una medalla de colección de 31,11 gramos, hecha de oro puro. También se podrán ver piezas interesantes, como la primera moneda acuñada en el país, que data del siglo XVIII y que lleva en una de sus caras la imagen de Fernando VI.

La Contraloría, en tanto, abrirá sus puertas y ha planificado un recorrido para mostrar documentos, libros y objetos de valor histórico, además de la recreación de la llamada "Contraloría del ayer", que revive una oficina con sus elementos característicos de antaño, y el Ministerio de Salud expondrá fotos patrimoniales en las instalaciones del viejo Hospital San José, ubicado en Independencia.
Casona Arrieta

Ubicada en el 10000 de Av. Arrieta, en el límite comunal entre Peñalolén y La Reina, la casona fue construida por el político nacional Mariano Egaña, en los albores del 1800, y comprada por el diplomático uruguayo José Arrieta, en 1875. Está cargada de simbolismos -siempre culturales- desde el portón de entrada hasta el cerro que marca el fin del terreno.

Esta casona es para la arquitecta Cazú Zegers un privilegio dentro de la Región Metropolitana. "Sólo con ver sus jardines, ya se ve una oda a la belleza, a la cultura y al arte. El lugar es un enorme trozo de historia, fundamental para mantener vivo en nuestra memoria el recuerdo de un hombre que destinó sus recursos y esfuerzos a dar vida a lugares como este, que dialoga con su entorno geográfico", asegura.

Durante la jornada habrá visitas guiadas cada 10 minutos, con una duración de 40, aproximadamente. "Espero que deambular por esa casa y sus jardines traiga de vuelta el amor por la belleza", anhela Zegers.

Casa del Escritor
Ubicada en una de las calles que desemboca en el Parque Bustamante, Almirante Simpson 7, la Casa del Escritor es, según el presidente de la agrupación Cultura Mapocho, Volker Gutiérrez, un lugar que hay que ver. De estilo Art Nouveau y vitrales delicadamente trabajados -por un artesano contratado exclusivamente para el proyecto-, este inmueble fue diseñado en 1927 para un particular por el arquitecto chileno Julio Machicao. La historia es otro de sus fuertes. Desde 1961, esta casa acoge a la Sociedad de Escritores de Chile (SECh), de la cual fueron socios los premios Nobel Gabriela Mistral y Pablo Neruda. Este último la presidió y fue parte de la comisión que consiguió que la casa que hoy ocupa fuera suya. Otro de los logros de Neruda, cuenta, fue construir una "taberna que permitiera la conversación distendida. Ella la consiguió gracias a los recursos de las autoridades mexicanas y fue bautizada como Refugio López Velarde", asegura Vólker Gutiérrez, de la agrupación Cultura Mapocho.

Facultad de Derecho

"A mirar dos veces los edificios de siempre", esa la invitación que hace el arquitecto del edificio Consorcio, Enrique Browne. Por eso vuelve su mirada a la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, por la que pasan centenares de personas cada día y que ha sido testigo de múltiples marchas, sin fijarse que no sólo es una gran obra de la arquitectura moderna en la capital, sino que está coronada por el único reloj que no ha dejado de funcionar en casi ocho décadas en la capital.

""Es una obra temprana del Movimiento Moderno en Chile (1936), ejecutada por el arquitecto Juan Martínez, el mismo que en 1974 inauguró el Templo Votivo de Maipú. La obra tiene gran fuerza expresiva, combinando expresionismo, racionalismo y academicismo despojado de ornamentación", comenta Browne. Además, será la primera vez que sus patios, recorridos habitualmente por más de 1.200 alumnos, serán visitados por ciudadanos comunes desde que fue declarado Monumento Nacional, el 28 de abril.

Edificio de la Cepal
Para la autora del refugio de La Parva, Mirene Elton, es importante desmitificar la idea de que patrimonio y modernidad van separados: "Qué mejor ejemplo que el edificio de la Cepal, ubicado a un costado del Parque Bicentenario, detrás de la rotonda Pérez Zujovic. Diseñado por Emilio Duhart -quien trabajó en el taller de Le Corbusier-, en su construcción se usó arena y bolones del lecho del río Mapocho. Este edificio inaugurado en 1966, "es considerado un hito en la arquitectura moderna latinoamericana y uno de los principales referentes de este movi- miento a nivel mundial", explica Elton. Uno de los elementos que destaca es el uso de la ventana horizontal en sus cuatro fachadas. "También fue innovador para la época la estructura del edificio que se suspende sobre cuatro pilares en cada ala, libera el suelo y dejando una planta libre en el primer piso. En la entrada, un estanque de agua asimétrico sirve de espejo a la fachada", explica Mirene Elton.

Centro Patrimonial Recoleta Dominica
En Av. Recoleta 683, a cinco cuadras de la estación Patronato, un portón de fierro esconde una casona del 1700, donde está la Biblioteca Patrimonial Recoleta Dominica, el Museo de Artes Decorativas (MAD) y el Museo Histórico Dominico.

Ahí vivían los sacerdotes dominicos, que oficiaban misa en la iglesia contigua. Bajo el lema "La contemplación y el conocimiento para ser transmitido a los demás", esta casona es una fiel mezcla de la fe y el conocimiento.

No sólo dejaron como herencia un edificio que hoy alberga un museo -con trajes de los religiosos de la época-, sino que además, la biblioteca poco conocida, con tres pisos de libros con más de 100 mil textos, llevados ahí por el fraile Manuel de Acuña.

A un costado está el MAD, se exhiben - todo el año- preciosos objetos de decoración como unos finos mates de plata. "Que reflejaban la forma de vivir de antes", dice la directora del GAM, Alejandra Wood.

Club de Oficiales Fach
La belleza y armonía arquitectónica que el Palacio Subercaseaux proyecta en la intersección de Agustinas con San Antonio, es la que rescata el arquitecto del Megaproyecto Costanera Center, Yves Besançon. Construido en 1903 para la familia Subercaseaux Brown -dedicados a la banca y al salitre-, hace 57 años que pertenece a la Fach. Hoy funciona ahí el Club de Oficiales, donde se hacen fiestas para la familia de la rama.

Ubicado frente al Teatro Municipal, en la Plazoleta Mekis -bautizada así en nombre del alcalde de Santiago en 1969-, su estilo se inspiró en la L'Ecole de Beaux Arts de París, de fines del siglo XIX: su zócalo y su mansarda con cubierta de tejuelas de acero. "Es uno de los espacios urbanos mejor logrados y conservados de nuestra ciudad", afirma Besançon. La doble altura en el hall principal hace sentir la majestuosidad del edificio. El frío del mármol de Carrara de la escalera, los detalles color oro de las murallas de blanco pulcro y los vitrales del techo hacen que el tiempo se congele.

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