Eduardo Subirats y la mirada crítica a la conquista del Nuevo Mundo

El filósofo español, autor de Mito y literatura, está en el país invitado por la Universidad de Chile.




Ensayista a la vez riguroso y sutil, con no escasa vocación de polemista, la labor de Eduardo Subirats (Barcelona, 1947) se ha desenvuelto en áreas como la historia, la literatura, la filosofía y la arquitectura. Se alejó de la España franquista para formarse en Francia y Alemania y regresó a su país a fines de los años 70, no sin disputas y desilusiones.

Teórico de las vanguardias estéticas, es autor de una serie de libros celebrados: Figuras de la conciencia desdichada (1979), El alma y la muerte (1983) o Metamorfosis de la cultura moderna (1991). Además, desde La ilustración insuficiente (1981) indagó en lo “incompleto” del proceso ilustrado español con respecto a la tradición europea, lo que se manifestó, por ejemplo, en la ferocidad de la Conquista. Su libro Continente vacío (1993), publicado durante las conmemoraciones del V Centenario de la Conquista de América, empezaba con una crónica de un viaje a Chiapas en 1991. El libro, por cierto, no fue bien recibido por la cultura oficial española. Desde entonces el autor parece estar más cómodo en Brasil, México o Estados Unidos, donde es profesor, en la Universidad de Nueva York. Invitado por la Universidad de Chile, Subirats imparte hoy el seminario La Teología de la Colonización (12.00 h), y la conferencia La Recuperación de la Memoria (19.00), ambas en  el Auditorio de la Facultad de Filosofía y Humanidades (Ignacio Carrera Pinto 1025).

¿Desde cuándo se ha interesado por Latinoamérica? 

Difícil saber cuándo comenzó esta aventura. Una mae de santo brasileira que me leyó el destino en los buzios, las conchas sagradas del candomble, me dijo que en mi anterior encarnación había sido un chamán amazónico. Naturalmente, me sentí muy halagado. Eso lo explicaría casi todo.

¿Lo impactó mucho el viaje a Chiapas?

Sí, mi primer viaje y todos los viajes que he seguido haciendo a Chiapas, me impactaron. Me impactan la intensidad de las culturas precoloniales de Chiapas, los monumentos mayas, la naturaleza. También me impacta la brutalidad de su clase gobernante…

¿La conquista de América aún no ha terminado?

A juzgar por los negocios de las corporaciones españolas y los viajes de Obama, no lo creo.

Según Mito y literatura, Ud. se toma en serio las obras literarias...

Si seriedad significa asumir una experiencia en su integridad y con entereza, si seriedad significa asumir la experiencia estética como un ritual de transformación interior, en este caso solo la comprensión de la literatura a partir de sus vínculos sicológicos profundos con las memorias mitológicas puede considerarse como “seria”.

¿Prefiere la figura del “intelectual” a la del “experto”?

El experto puede definirse como un funcionario del conocimiento instrumental, también en las humanidades. Es por tanto una categoría limitada a la organización burocrática del conocimiento. El intelectual, en su concepción clásica -podemos hablar de Montaigne o de Adorno como intelectuales en este sentido- gira en torno a la libertad individual, la libertad humana y todas las expresiones literarias y no literarias de libertad.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.