El gordo de Puente Alto

Franco Garrido, Jugador Chileno de basquetbol que actualmente milita en Puente Alto equipo que quedo fuera de campeonato en la ultima fecha,posa para entrevista de la seccion de negocios en el Mall Plaza Tobalaba ubicado en la comuna de Puente Alto.
Franco Garrido, posando ayer para La Tercera. Foto: Luis Sevilla / La Tercera

Capitán y referente del recién descendido Municipal Puente Alto, Franco Garrido llama la atención por su volumen. No le acompleja ese sobrepeso ni se preocupa por las burlas. De su equipo se siente más hincha que jugador, y denuncia discriminaciones por ser puentealtinos.




Franco Garrido está de vacaciones. El domingo, capitaneando a Municipal Puente Alto, perdió la serie ante Universidad Católica y con eso, se concretó su descenso en la Liga Nacional de Baloncesto. Tras el fin del encuentro, rompió en llanto en plena cancha y aquella noche hasta pensó en dejar de competir: "Estuve dos días muy afectado, no quería hablar con nadie ni saber nada de básquetbol. Pensé en colgar los zapatos luego del fracaso. Pero gracias al apoyo de mi familia y de la hinchada me convencí de que hay que echarle para adelante y conseguir el ascenso la próxima temporada".

A principios de año, la meta del equipo del sur de la capital era mantenerse en primera e incluso, dar la sorpresa y campeonar. Sin embargo, firmó la peor campaña de su historia. Según el alero, también estudiante de Educación Física, se debió en parte a problemas de camarín y malas decisiones: "A mitad de semestre se fueron varios jugadores, hubo conflictos con el entonces entrenador, Claudio Lavín, y las contrataciones de los extranjeros no fueron las indicadas. Llegó incluso el momento en que los hinchas peleaban con los jugadores y nos tiraban para abajo".

"Llegó incluso el momento en que los hinchas peleaban con los jugadores y nos tiraban para abajo"

Si no fuera porque para salir a la calle viste con zapatillas, shorts hasta la canilla y polera sin mangas, nadie podría siquiera pensar que es basquetbolista de alto rendimiento. Garrido mide 183 centímetros y pesa 105 kilos. Es decir, su índice de masa corporal señala que posee obesidad moderada. Los números no mienten. No es sólo apariencia. En puridad, Garrido es obeso. Pero mucho no parece preocuparle. "A pesar de que termino muy cansado y adolororido después de los partidos, sé sacarle ventajas a mi físico. A los rivales termino llevándomelos por mi contextura y defensivamente soy más potente", asegura el Toro, como le apodan precisamente por su fenotipo. Cree que si adelgazara sería más rápido, pero no necesariamente un mejor basquetbolista.

"A pesar de que termino muy cansado y adolororido después de los partidos, sé sacarle ventajas a mi físico"

El puentealtino comenzará en unas semanas un plan para bajar de peso, promete, con el fin de evitar lesiones y prolongar su carrera. Pero no se lo toma con seriedad. Hacer dieta le cuesta una enormidad: "Me alimento súper mal. Vivo a dos cuadras del mall, así que paso seguido al patio de comidas. Además, cuando llego a mi casa, tengo que comer lo que hay nomás. Si el día del partido hay porotos, tengo que comer porotos. En todo caso, encuentro que no influye tanto".

"Me alimento súper mal. Vivo a dos cuadras del mall, así que paso seguido al patio de comidas"

Cuando Puente Alto juega de visita, las burlas no dejan de caer desde las gradas. "Los hinchas rivales me gritan 'guatón culiao ' o '¿está bueno el McDonalds?', pero a mí me da lo mismo; yo simplemente respondo con puntos o con una buena defensa.

"Los hinchas rivales me gritan '¿está bueno el McDonalds?', pero a mí me da lo mismo; yo simplemente respondo con puntos"

Desde su fundación en 2004, Garrido estuvo casi siempre ligado a Municipal Puente Alto. Salvo por un par de años, cuando defendió los colores de Los Leones de Quilpué. En 2015 retronó al club del que se declara hincha: "Busqué volver. Soy bien mamón y tenía muchas ganas de estar con mi mujer y mi familia jugando en el equipo y en la comuna que amo". Es ídolo de la institución, aunque prefiere sentirse sólo un referente.

<strong><span style="color: #000000">105 kilos</span></strong> es el peso del alero y capitán de Puente Alto. Llegó a pesar 120 kgs. hace unos años. <strong>Mide 183 centímetros.</strong>

En Puente Alto el baloncesto es el único deporte que se practica de forma profesional. Y se nota. . Al gimnasio municipal llegan cerca de mil personas cada vez que juegan Los Perros. Más público que incluso, algunos partidos de fútbol de Primera: "La hinchada es muy fiel. Nos seguirán dando apoyo ahora que descendimos". Y al Toro, lo adoran.

Garrido también tiene espacio para la denuncia: "Siempre nos han discriminado por ser de Puente Alto. Por ejemplo, los de Católica nos tratan de kumas o flaites; que andamos peleando con todo el mundo y que nuestra hinchada es conflictiva. No es así, como indican los estereotipos. Yo que vivo acá, puedo decir que la vida es tranquila".

"Los de Católica nos tratan de kumas o flaites; que andamos peleando con todo el mundo y que nuestra hinchada es conflictiva"

Dos semanas de vacaciones le esperan. Chango, como le dicen sus familiares, se toma en serio el descanso. No saldrá a trotar, no andará en bicicleta y menos jugará baloncesto. Tal como un verano hace unos años, en los que llegó a pesar 120 kilos, su récord personal. Ya vendrá nuevamente la pretemporada. Garrido se siente gordo, pero también cree que es parte de su identidad. Si fuera más flaco, no sería el Toro de Puente Alto.

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