La red Globo de la familia Marinho mostrará el 'futuro' de la TV con la Copa Mundial

La compañía instalará pantallas especiales en el elegante barrio de Jardim Botánico de Río de Janeiro para transmitir tres partidos del torneo en el nuevo formatode ultra-alta definición, conocido como 4K.




La emisora brasileña Globo Comunicaçao Participaçoes, de la que es propietaria la familia multimillonaria Marinho, planea usar la final de la Copa Mundial de fútbol para mostrar un tipo de resolución de televisión que necesita para ser transmitida televisores con un valor superior a los US$5.000.

Globo trabajará con Sony y la FIFA, el organismo rector del fútbol, para transmitir tres partidos de la Copa Mundial, incluida la final del 13 de julio, en un formato de ultra-alta definición, como modo de "mirar al futuro", según adelantó José Manuel Marino, responsable de tecnología para el deporte.

La compañía instalará pantallas especiales en el elegante barrio de Jardim Botánico de Río de Janeiro para transmitir los encuentros en el nuevo formato, conocido como 4K, señaló.

Según dijo Marino, Globo necesitará unos 2.500 trabajadores diseminados por el quinto país más extenso del mundo para transmitir el torneo de un mes de duración -con unos 1.500 de ellos acreditados por la FIFA-.

Dadas las dimensiones del equipo y las distancias que debe recorrer, la cobertura de Globo "será la más grande que conozco", agregó.

La empresa de capital cerrado Organizaçoes Globo, perteneciente al grupo de medios más grande de América Latina, es dueña de la emisora Globo. El grupo es controlado por los hermanos Roberto Irineu, Joao Roberto y José Roberto Marinho, que tienen un patrimonio combinado de más de US$26.000 millones, según el ranking de multimillonarios de Bloomberg.

Sony y FIFA probaron el formato 4K el año pasado durante la Copa Confederaciones en transmisiones de partidos seleccionados a puertas cerradas, a las que sólo se accedía por invitación. El formato también se usó en algunos países, incluida Corea del Sur, aunque no para eventos en vivo, explicó Marino.

Aún falta mucho para que se convierta en una opción masiva, porque todavía no se ha fijado el espectro y la normativa, añadió.

Sony, el mayor exportador de electrónica de Japón, vende televisores 4K por US$5.869 cada uno en su sitio web brasileño y a US$2.699 en su sitio web estadounidense.

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