La U ya quiere estirar a Hoyos

En Azul Azul están convencidos del proyecto que conduce Guillermo Hoyos. El técnico, además de levantar el nivel del primer equipo, se ha encargado de diseñar paralelamente un plan que busca potenciar las series juveniles del club. En el CDA sólo suma halagos.

En la U, donde se declaraban contrarios a los contratos largos de los entrenadores, ya creen Hoyos, quien arribó en enero, se ganó una extensión de contrato por todo el torneo largo de 2018. El ex técnico de la selección boliviana, en su llegada al equipo laico, acordó un vínculo que le aseguraba el buzo hasta diciembre de 2017. "Aún no se conversa con él, pero es un hecho que lo vamos a hacer. Nos gusta mucho su forma de trabajar y la relación que tiene con todos los estamentos del club", dicen desde el segundo piso del CDA. Al técnico, además, se le aumentará su salario, que hoy asciende a US$ 650 mil.

El alza futbolística del equipo tiene conforme a los dirigentes y a la plana ejecutiva del club. Le reconocen el ser un factor clave en el buen ambiente que se vive en La Cisterna. Descomprimió un plantel que sólo sumaba fracasos e indisciplinas durante las últimas temporadas.

Lo cierto es que la oferta aún no se la presentan al entrenador, de manera formal, pero se le hará una vez que finalice el Clausura. La idea es no desconcentrarlo, ni menos sacarlo de los objetivos que se trazaron a comienzo de temporada: dejar a la U lo más arriba del certamen local.

La semana pasada, en conferencia de prensa, Hoyos evitó referirse a su situación contractual. Sin embargo, sabe del interés de la concesionaria: "Ni me he planteado el tema de renovación, yo vivo el presente. No es el momento, pero estoy muy contento y agradecido de esta institución. Estoy sorprendido por las personas que la guían", dijo. "¿Qué pasa si se acercan los dirigentes? Sería un honor que quieran renovarme, pese a que soy un tipo al que sólo le interesa el presente; el día a día".

Desde que Carlos Heller asumió el mandato de Azul Azul, la directiva ha variado los métodos de extensión de contrato. En el caso de Martín Lasarte, se le fichó en junio de 2014 por un año, pero se le extendió por seis meses con una revisión a final de 2015. El DT no continuó en el cargo una vez cumplido su vínculo, dejando al equipo con el título del Apertura 2014 y la Copa Chile 2015.

En la concesionaria toman precauciones. Sigue dando vuelta el contrato con Sebastián Beccacece. Aseguran que fue una lección. El argentino exigió un contrato de 30 meses, que se vio interrumpido a los nueve: "La idea de que sean contratos por un año. Con Beccacece se pagó una fortuna por hacerle un contrato que pocos entienden", dice un directivo azul. En tanto, Víctor Hugo Castañeda, sucesor del ex ayudante de Jorge Sampaoli, aceptó tomar el cargo por seis meses, con la opción de renovar si conseguía meter a la U en un torneo internacional. Lo hizo, pero de igual manera no siguió al mando del equipo.