La UC parece un hospital

Germán Lanaro, desgarro. José Pedro Fuenzalida, distensión. Carlos Espinosa, esguince. David Llanos, fuerte contractura. Y encima, Cristián Álvarez, expulsado desde la banca ante Everton.

En Universidad Católica no lo pasan bien con las lesiones. Porque recién van transcurridas dos fechas del Clausura y los cruzados ya lamentan que cuatro jugadores se hayan tenido que bajar del combate por diversas dolencias. Algunas más graves que otras, como la de Lanaro, quien recién cumplió una de las tres semanas que se estiman durará su recuperación. Las bajas llegan a cinco con la roja directa que vio el Huaso por reclamar una falta en contra desde la suplencia.

Para el partido del sábado frente a Wanderers se evalúa la presencia del Chapa. En la precordillera, eso sí, esperarán hasta el final para tomar una decisión. Si es que existe un mínimo riesgo que se resienta, el seleccionado nuevamente se quedará al margen. Situación similar es la de Llanos, quien sufre con la pierna izquierda y se ha mantenido entrenando con dificultades, separado de sus compañeros.

Quien de seguro no llega al compromiso es Espinosa, lo que se ratificó tras los exámenes de ayer. Ahí se confirmó que el volante padece un esguince en el tobillo izquierdo.

"Claramente no es el mejor escenario para cómo lo pensamos. Nunca se pensó esta situación pero ya está. Son situaciones que uno vive día a día. Convives con poder tener una lesión", dijo Roberto Gutiérrez al respecto.