Las extrañas adicciones y vicios de diez celebridades del cine y la música

Videojuegos, autos, zapatos, apuestas, comidas y jugos. La lista incluye figuras desde Avril Lavigne a Ben Affleck.




Algunos fuman, otros beben y hasta consumen diversos tipos de drogas. Sin embargo, el parámetro para medir las adiciones y los vicios no se limita a los tres ejemplos recién mencionados, sino que se trata de un fenómeno mucho más amplio y complejo que, cuando de celebridades se trata, se vuelve cada vez más extraño y "exótico".

El portal brasileño Globo elaboró una lista con las diez adicciones o vicios más extraños de las celebridades de la industria musical y cinematográfica del mundo, los cuales van desde un gusto desmedido por un jugo de frutas hasta la ludopatía que llega a costar altas sumas de dinero a quien la padece.

Anna Kendrick: Videojuegos

La actriz que interpreta a "Jessica" en la Saga Crepúsculo tiene un vicio bastante común entre los más jóvenes: los videojuegos. Según ha confesado en diversas revistas, puede pasar varias horas continuas jugando, e incluso ha llegado a asumir que pasa todo su tiempo libre jugando "Angry Birds" o algún juego similar.

Cheryl Cole: Jugo de Zanahoria

La conocida cantante tiene una particular fijación por el jugo de zanahoria. Según han dicho sus cercanos, puede ingerir hasta dos litros de este jugo al día el cual, según ella asegura, le ayuda a mantener la figura.

Jesse Eisenberg: Autos viejos

El actor que se hizo conocido en todo el mundo por interpretar a Mark Zuckerberg en la película de 2010 "Red Social", tiene un particular hobby: le encanta tener autos viejos que han sido abandonados. Según han comentado sus cercanos, ya tendría 42 de ellos en su casa.

Ben Affleck: Apostar en el póker

Uno de los juegos online más popular entre los adultos es el póker. Sin embargo, el ganador de dos premios Oscar llevó este gusto a un nuevo nivel, puesto que jugaría póker cuatro veces por semana, y en cada una de ellas apuesta US$ 20 mil. Se trata de un gusto nada de económico, y es sabido que en una ocasión perdió cerca de medio millón de dólares durante un paso por Las Vegas.

Megan Fox: Zapatos

La bella protagonista de Transformers tiene una fijación que cada vez se hace más recurrente entre las mujeres: el gusto por los zapatos. Sin ir más lejos, cuando recibió el pago por su papel en la película de Michael Bay, lo primero que hizo fue comprarse un par de Roberto Cavalli, los cuales le costaron cerca de US$ 600.

Jack Black: Té verde

Según los expertos, son diversos los beneficios del Té verde, entre las que destacan su capacidad antioxidante, su ayuda a perder y hasta mejora la dentadura. Quizás será por todo eso y más cosas que el actor y músico estadounidense dejó el alcohol, el cigarro y varias otras drogas para hacerse adicto a esta infusión.

Ozzy Osbourne: "Sugar Puffs"

Otro músico que pasó de consumir alcohol y drogas para llevar una vida más sana. Sin embargo, el ex frontman de Black Sabbath ha generado una particular adicción por los cereales "Sugar Puffs". Pero hay un problema asociado a este "gusto", puesto que esa marca de cereales sólo se vende en Inglaterra, por lo que el músico debe importar el producto constantemente a Estados Unidos, donde reside.

Robert Pattinson: cereales y Coca Cola Light

La estrella de la Saga Crepúsculo tiene dos gustos extraños que lo hacen merecedor estar en esta lista. Primero, su obsesión por comer solamente cereal por las mañanas; y segundo, su gusto desmedido por las Coca Cola Light. Según él mismo ha confesado, consume más de 300 latas a la semana.

Avril Lavigne: Maquillaje

La popular cantante canadiense tiene una obsesión que se puede apreciar en casi todas las fotografías suyas que inundan la red: el constante uso del maquillaje. Ella misma ha señalado que le obsesiona utilizar este tipo de productos, aunque su fijación está en buscar nuevas alternativas para realzar sus ojos.

Salma Hayek: Amamantar niños

Nada de común es el "vicio" de la reconocida actriz mexicana. Según ha señalado ella misma, desde que tuvo su hija en 20007, tiene una constante necesidad de amamantar a otros bebés que lo necesitan. Incluso ha llegado a comparar esta compulsión con el alcoholismo y la dependencia a algunas drogas.

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