Licitación del Transantiago incluye multas por no detención en paradas

Transantiago

Bases incorporan multas de hasta $ 2,6 millones, por no respetar el indicador.




El principal reclamo de los pasajeros del Transantiago al Ministerio de Transportes es que los choferes no se detienen en los paraderos. Por eso, la cartera multará con hasta 100 Unidades de Fomento ($ 2,6 millones) a las empresas que no cumplan con esta norma, lo que está incluido en las bases de licitación del Transantiago, que definen nuevas exigencias a las concesionarias.

En el ministerio se explicó que las empresas se expondrán a sanciones por no cumplir con el Incumplimiento de Detención en Paradas (IDP), desde 2018, cuando comience a operar el nuevo sistema. Esta medida toma relevancia, pues desde el próximo año habrá un esquema de pago a los operadores: se cancelará un 75% de los recursos por kilómetro recorrido, lo que generaría, plantean los expertos, un incentivo para que las empresas no recojan pasajeros, pues pesa más la distancia. El resto de los fondos se pagará por usuario transportado (25% de la fórmula).

De acuerdo a las bases –ingresadas a la Contraloría General de la República el viernes recién pasado-, el Directorio del Transporte Público Metropolitano supervisará las detenciones de los servicios. Se verificará que los buses cumplan cuando un usuario lo pide o bien en el caso de que la máquina posea capacidad.

La cartera considera "detención del vehículo" cuando lo hace en el lugar demarcado, abre las puertas, y espere la subida de los viajeros. Esta disposición podría ser fiscalizada por los denominados "pasajeros incógnitos" o inspectores en terreno. Aún se evalúa cómo se medirá.

Juan Carlos González, gerente de Transurbano, sostuvo que es necesario crear este indicador, pues "efectivamente, puede que algunas empresas no cumplan, pues ahora los recursos se cancelarán, en su mayoría, por la distancia que se recorre". Sin embargo, González dijo que "lo que hay que evaluar bien es cómo se medirá esta área, pues si se hace a través de equipos tecnológicos nos parece adecuado, pero si son personas las que monitoreen resulta subjetivo".

Las bases de la convocatoria, que no tienen plazo para ser sancionadas por el ente de control, establecen incentivos por la calidad del servicio. Habrá incentivos en el caso de que no haya mantención del vehículo o si se cumple con la regularidad esperada (lo que define cuánto espera un usuario por el bus), entre otros.

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