Los preparativos de Martelli con el fiscal

Tras un par de meses preparando en solitario su defensa, Giorgio Martelli, el operador detrás del financiamiento de la precampaña de Bachelet, llegará esta semana a la fiscalía a contar su verdad.




Cerca de 45 minutos estuvieron reunidos el lunes 18 los abogados defensores de Giorgio Martelli Robba, Cristián Arias y Claudio Pavlic, con el fiscal nacional, Sabas Chahuán, coordinando la entrega por parte del ex recaudador de la campaña de Michelle Bachelet de los antecedentes contables de la empresa Asesorías y Negocios SpA.

Los abogados defensores del autodenominado operador político llegaron cerca de las 16 horas a la fiscalía con ocho archivadores que contenían la contabilidad de la empresa creada por Martelli en 2011 y en la que figuran las 23 facturas que el geógrafo emitió entre enero de 2012 y marzo de 2013 a SQM Salar, una de las filiales de la empresa minera no metálica, por más de $ 223 millones.

En las gruesas carpetas de cartón también aparecen los contratos suscritos en el mismo período por Martelli con las empresas del grupo Angelini: Copec y Celulosa Arauco, por otros $ 208 millones, y con la empresa Sociedad de Gestión Ambiental (SGA), vinculada a Jaime Solari, hermano del dirigente socialista y actual presidente de TVN, Ricardo Solari.

Así, en las manos del Ministerio Público comenzó a tomar forma un temor que se instaló en el oficialismo a mediados de abril, cuando se reveló que el entonces ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, aparecía en la contabilidad de la empresa de Martelli.

Desde entonces, los antecedentes contables que oficializó el lunes 18 Asesorías y Negocios ante la fiscalía permitieron corroborar que fueron -al menos- 26 personas las que emitieron boletas a la sociedad de Martelli. La inquietud en las filas oficialistas se acrecentó luego de que se evidenciara que 21 de ellos se desempeñaron en el comando presidencial de Michelle Bachelet.

El problema radica -en todo caso- en que los pagos de Asesorías y Negocios demuestran que el grupo comenzó a trabajar en 2012, aun antes del período legal de campaña, y su existencia -desconocida para los partidos de la Nueva Mayoría, incluido el Partido Socialista, en el que milita Bachelet- ha generado indignación en sectores oficialistas.

Tras la entrega de las carpetas, los abogados Arias y Pavlic le habrían asegurado a Chahuán que Martelli estaba dispuesto a  declarar  y a entregar toda la información que fuera necesaria, a cambio de que se le garantizara que se le reconozca colaboración eficaz en la causa, lo que le permitiría reducir las sanciones y, sobre todo, asegurar que el ente persecutor no solicite medidas cautelares en su contra al momento de pedir su formalización por delitos tributarios.

Por la misma razón, en el Ministerio Público afirmaron que los abogados de Martelli insistieron en que el geógrafo sólo declararía ante el fiscal nacional y no ante alguno de los fiscales adjuntos del caso Penta-SQM. Chahuán, señalan las mismas fuentes, accedió, por lo que debió postergar el interrogatorio de Martelli, programado originalmente para el miércoles 20.

Ese día, Chahuán tenía programado asistir en Valparaíso a una sesión del Congreso y no alcanzaba a regresar a tiempo a Santiago para interrogar a Martelli como imputado en la causa SQM. Postergar una semana la declaración del autodenominado operador daba margen, además, para que el geógrafo, de 55 años, se comprometiera a entregar a la fiscalía otros documentos claves para el caso.

El acuerdo se selló dos días después -el viernes 22-, cuando Arias llegó al Ministerio Público con los informes con que Asesorías y Negocios justificó los pagos ante SQM Salar y las empresas del holding Copec.

Fuentes vinculadas a la investigación recuerdan que durante el proceso de revisión que hizo Impuestos Internos a los informes que AyN SpA entregó a SQM Salar, y que se conocieron tras la rectificación que hizo la empresa minera, se pudo apreciar que en su mayoría eran recortes de prensa, los que se presentaban como "estudios y análisis de prospección económica y social".

También llamó la atención de los investigadores que ninguno de los tres informes que supuestamente hizo Rodrigo Peñailillo en 2012 y por los cuales cobró cuatro boletas de cuatro millones de pesos cada una a Asesorías y Negocios, fue entregado por la defensa de Martelli.

Toda esta semana, Chahuán y los abogados del geógrafo han mantenido abiertos los canales de comunicación. Hasta ahora, las señales que ha recibido el Ministerio Público son que la estrategia que seguirá el autodenominado operador político será colaborar con la fiscalía.

En el Ministerio Público dicen que Martelli les ha hecho saber que se siente abandonado e incluso que ha recibido amenazas. El geógrafo, aseguran fuentes de la investigación, estaría emocionalmente abatido y no estaría dispuesto a que se le sindique como el artífice de un sistema de financiamiento irregular de campañas.

Martelli ha dicho a sus cercanos que el fue sólo un engranaje más de una maquinaria de financiamiento, de la cual él no era el recaudador ni quien tomaba las decisiones sobre el destino de las platas. También ha reclamado que los responsables de este sistema no han dado la cara.

A sus cercanos, Martelli ha insistido en que no se enriqueció con este sistema                           -de hecho, advierten, sigue viviendo en el mismo departamento arrendado desde hace varios años, frente al Costanera Center-, y que considera injusto que sólo se lo acuse a él.

La eventualidad de la irrupción de Martelli, en todo caso, había activado las alarmas de Peñailillo y el entonces ministro de Hacienda Alberto Arenas, cuando aún estaban en el gabinete de Bachelet.

Tanto así que el errático accionar de La Moneda en el caso SQM gatilló una severa crisis que terminó cuando se evidenciaron las presiones de Interior al hoy también ex director de Impuestos Internos, Michel Jorratt, para dilatar la presentación de una querella en contra de Martelli. El viernes 22, en una entrevista en Qué Pasa, el propio Jorratt reconoció las gestiones.

La precampaña

Apenas regresó a Chile  a fines de 2011 - luego de realizar un máster en Análisis Político en la Universidad Complutense de Madrid-, Peñailillo se abocó al reservado trabajo de allanar el camino para una segunda candidatura presidencial de Bachelet, la que recién se oficializaría en marzo de 2013.

Es precisamente ese período durante el cual Martelli cumpliría el discreto trabajo de articular un sistema de financiamiento para la hoy denominada pre-campaña que está en la mira del Ministerio Público.

No es un misterio que Peñailillo una vez que desembarcó en Santiago se instaló en la Fundación Dialoga -específicamente en un segundo piso que quedó a su disposición-, donde comenzaron a gestarse los primeros contactos con quienes meses más tarde asumirían puestos formales en el comando presidencial.

El ex ministro -quien quedó a cargo de la secretaría ejecutiva de la campaña de Bachelet una vez lanzada la postulación de la hoy Mandataria- reunió en su entorno a un selecto grupo que en su mayoría aparece en la contabilidad que Asesorías y Negocios SpA entregó a la fiscalía y que fue revelado esta semana por La Tercera.

Así, Peñailillo fue conformando un equipo que comenzó a operar al menos un año antes de iniciarse oficialmente la campaña, todos cercanos a él y que terminaron en distintos puestos en La Moneda una vez conquistado el gobierno.

En la lista entregada por Martelli aparecen, entre otros, Flavio Candia, a quien se señala como uno de los más estrechos colaboradores de Peñailillo.

Según quienes conocieron cómo operó el equipo de precampaña, Candia comenzó a trabajar junto al ex ministro apenas éste llegó de España, oficiando como una suerte de jefe de gabinete o secretario, la misma función que desempeñó una vez que se estructuró formalmente el comando, donde estaba instalado en una oficina contigua a la de Peñailillo. Más tarde, Candia lo acompañó a La Moneda como encargado de la Unidad de Análisis Estratégico del Ministerio del Interior.

Un rol parecido al de Candia lo cumplió Héctor Cucumides. Apenas regresó a Chile, el ex ministro retomó el contacto con él, integrándolo a su equipo más estrecho. La confianza entre ambos era tal, que Cucumides oficiaba como su más reconocido contacto, especialmente en lo que se relacionaba con gastos, labor que se extendió al comando donde era el encargado de autorizar los viáticos, autos y el hotel donde se alojarían los integrantes de la campaña. A él se le sindica -además- como el enlace entre el comando y Cristián Riquelme, otro hombre fuerte de Peñailillo y quien hoy se desempeña como administrador de La Moneda.

Cucumides también desembarcó en el Ministerio del Interior como uno de los principales asesores del ex titular de Interior.

Robinson Pérez, en tanto, se instaló en la Fundación Dialoga en 2011. Allí colaboraba ad honorem en un grupo semanal de análisis y, en paralelo, comenzó a trabajar codo a codo con Peñailillo. Ya en el comando pasó a desempeñarse como un colaborador directo de éste y de María Angélica Alvarez, "la Jupi". En La Moneda, en tanto, trabajó como el principal asesor político del renunciado ministro.

Candia, Cucumides y Pérez dejaron Interior luego de la remoción de Peñailillo y la llegada del hoy titular de la cartera, Jorge Burgos.

Quienes hoy reconocen el trabajo que comenzó a coordinar Peñailillo antes de que se formara oficialmente el comando de campaña, en marzo de 2013, sostienen que una parte importante de éste se estructuró en base a recopilar antecedentes y generar contenidos programáticos.

El ex ministro de Hacienda Alberto Arenas no figura en los pagos realizados por Martelli, aunque a él le correspondió la labor de coordinar la redacción del programa de gobierno, la que se habría iniciado aun antes de la conformación oficial del comando de campaña.

En 2012, el economista se desempeñaba como miembro del directorio de Canal 13 y percibía remuneraciones como académico de la U. de Chile.

Varios de los ex colaboradores de Arenas figuran en la contabilidad que Asesorías y Negocios SpA entregó a la fiscalía, y según se señala en círculos bacheletistas, todos ellos se abocaron a colaborar en una serie de minutas que comenzaron a dar forma al futuro programa de gobierno, aun cuando no se oficializaba el regreso de Bachelet.

Es el caso de Fidel Miranda, a quien se identifica como uno de los principales asesores de Arenas en la confección del programa y quien, una vez instalada Bachelet en el gobierno, llegó a la Subsecretaría de Hacienda. Miranda es un viejo conocido del ex ministro de Hacienda, ya que se desempeñó como su asesor personal cuando este último fue director de Presupuestos.

A él se suma Jorge Rodríguez, quien no obstante nunca haber cumplido funciones formales en el comando de Bachelet, colaboró con Arenas en la elaboración de diversas minutas.

En este grupo también se ubica a Enrique Paris, quien trabajaba directamente con el ex ministro de Hacienda en el comando, en el equipo programa. También se le identifica como uno de los que articularon las minutas que -con el tiempo- sentaron las bases de la propuesta de la entonces candidata Bachelet. Una vez instalados en La Moneda, Paris se sumó a Hacienda como jefe de asesores de Arenas.

El ex director del Servicio de Impuestos Internos Michel Jorratt, quien colaboró en la fase de la confección del programa, también aparece en la lista de Martelli.

Fue precisamente Jorratt quien dio luces de la naturaleza del trabajo que realizaba el grupo en esa época en la entrevista que publicó Qué Pasa el viernes 22.

Al ser consultado si conocía al dueño de Asesorías y Negocios SpA, Jorratt señaló que "lo vi una vez, por 10 minutos, un día en que nos juntamos en un Tavelli a firmar un contrato". Y cuando se le pregunta quién lo contactó con él, responde que "prefiero no dar nombres, porque no quiero involucrar a otras personas sin su autorización, pero eran economistas ligados a la Nueva Mayoría, que estaban pensando en futuras reformas para un futuro gobierno (…). Hice varios informes durante 2012 que tenían que ver con propuestas de reformas tributarias. Fueron más bien una especie de informes acumulativos que terminan con una propuesta ya más contundente de una reforma tributaria".

Es decir, Jorratt asumió que sus trabajos no tuvieron como receptor a una empresa, sino que su objetivo era fortalecer el trabajo programático que se llevaba a cabo en reserva.

Además de los pagos de honorarios, ha ido trascendiendo que Asesorías y Negocios también canceló en 2012 estudios de opinión de la consultora Feedback, reconocida empresa dedicada a las encuestas políticas.

El propio Martelli, en tanto, fue el encargado de firmar el primer contrato de arriendo del comando de Bachelet en calle Tegualda.

Debate oficialista

Ante la inminencia de la declaración de Martelli, sectores de la Nueva Mayoría han intentado convencer a La Moneda de que se adelante a las eventuales revelaciones del geógrafo y se reconozca la existencia de un equipo de precampaña.

El tema no es menor, en todo caso, ya que implica asumir que el grupo de colaboradores más estrecho de Bachelet, varios de los cuales aún desempeñan labores de gobierno, estuvieron involucrados en prácticas de financiamiento irregular de la candidatura.

El martes 19, el renovado comité político que encabeza el ministro del Interior, Jorge Burgos, debió escuchar las inquietudes de los senadores de la Nueva Mayoría sobre el tema.

Quienes estuvieron presentes en el debate señalaron que el testimonio de Martelli fue tema obligado, así como la incertidumbre sobre los futuros pasos del Ministerio Público.

Dirigentes del conglomerado señalaron que se enviaron mensajes al Ejecutivo para morigerar las inminentes revelaciones del dueño de Asesorías y Negocios y asumir una ofensiva por la implementación de una precampaña que no es legal.

"Con Martelli se tiene que saber la verdad, y si tras su testimonio se tienen que aplicar sanciones, éstas deberán ser aplicadas a todos, le duela a quien le duela", señaló el ex presidente del PS Osvaldo Andrade.

En Interior, en todo caso, han descartado tomar la iniciativa y reiteran que todo está en manos de la fiscalía. El mismo día en que se revelaron los pagos de Martelli, que incluían a buena parte de los otrora integrantes del comando de Bachelet, el vocero Marcelo Díaz sostuvo que "el gobierno no se va a pronunciar ni va a ser comentarista de cada una de las actuaciones del Ministerio Público o de los tribunales".

En privado, no obstante, personeros del Ejecutivo reconocen que se siguen con preocupación los futuros pasos de Martelli.

Funcionarios del Servicio de Impuestos Internos afirmaron a Reportajes el viernes 22 que la subdirección jurídica del organismo ya tiene redactada la ampliación de la querella en contra de Martelli por las operaciones realizadas los años 2012 y 2013 entre la sociedad Asesorías y Negocios SpA y SQM Salar, filial de la empresa minera no metálica. Faltaría, entonces, sólo la firma del director subrogante de la entidad fiscalizadora, Juan Alberto Rojas, para abrir totalmente las puertas de la empresa, cuya contabilidad mantiene en vilo a La Moneda y llevará la investigación por prácticas irregulares de financiamiento de campaña al corazón mismo del bacheletismo.

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