Alianza de Macri se impone a nivel nacional y Cristina K obtenía amargo resultado

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En las primarias con miras a las legislativas de octubre, Cambiemos arrasó en parte importante de Argentina. A su vez, Cristina Kirchner, que postula al Senado, no lograba el resultado esperado en la provincia de Buenos Aires.




Aunque las primarias en Argentina son consideradas como un mero ensayo con miras a las elecciones legislativas del 22 de octubre, ayer estaba en juego algo mucho más importante y trascendente: el apoyo al gobierno de Mauricio Macri y la fuerza de la ex Presidenta Cristina Fernández.

Una vez que cerraron las mesas, tanto el kirchnerismo como el macrismo se atribuyeron la victoria en base a sondeos a boca de urna. Sin embargo, a partir de las 21.00, con la entrega de los primeros resultados oficiales, el panorama cambió de manera radical. Así, no solo hubo coincidencia en que Cambiemos, la alianza de Macri, lograba imponerse como la primera fuerza a nivel nacional, sino que Cristina K estaba obteniendo un pésimo resultado para sus intereses en la provincia de Buenos Aires.

Con el 32% escrutado, la ex presidenta lograba apenas un 32%, mientras que el ex ministro de Educación Esteban Bullrich, de Cambiemos, obtenía un 36,4%, un escenario que no adelantó ninguna encuesta. Era tal el optimismo del macrismo en esa provincia, gobernada por María Eugenia Vidal, que el comando de Bullrich señalaba que la batalla contra CFK la ganaría por tres puntos.

En el "bunker" de Cristina Kirchner las caras eran de desconsuelo, mientras que los comentaristas políticos coincidían en que la noche sería larga hasta saber a ciencia cierta si la ex mandataria, que postula al Senado en las legislativas del próximo 22 de octubre, ganaba o perdía. Eso sí, analistas como Joaquín Morales Solá, columnista de La Nación, advertían que en ningún caso CFK arrasaría.

Para Cristina K se trata de un contundente golpe. Ello, porque estas primarias eran vistas como una suerte de plebiscito entre Macri y ella. Y en esa lucha, no solo el Presidente lograba salir fortalecido anoche, sino que la ex mandataria quedaba debilitada para octubre.

Al haber una sola lista de candidatos por partido en la mayoría de los distritos, la primera duda que debía despejarse era si Cristina (Unidad Ciudadana) aún goza de un amplio apoyo ciudadano y si su popularidad no solo le dará un escaño al Senado en octubre, sino que posibilitará una nueva aventura presidencial. En octubre se renovará la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado.

Por eso, lo clave de estas primarias no solo era el caudal de votos a nivel nacional, sino que también la medición de fuerzas en la provincia de Buenos Aires, el mayor bastión del país, ya que representa al 37% del electorado a nivel nacional.

Los candidatos de Macri arrasaban en la Ciudad de Buenos Aires, Mendoza, Córdoba, Santa Fe, Santa Luís e incluso en la provincia de Santa Cruz, histórico reducto del kirchnerismo.

"El cambio está más vivo que nunca. Este cambio no es propiedad de un gobierno, es de todos los argentinos, que tenemos derecho a vivir mejor", dijo Macri, cerca de las 23.00 ante sus eufóricos partidarios. "Felicito a todo el equipo por la tarea que hicieron. Podemos gobernar pensando en las cosas que hay que hacer, en lo importante", agregó.

"El triunfo de Cambiemos es realmente algo impensado, tomando en cuenta que tiene 15 minutos de historia", afirmó el comentarista Jorge Lanata en su programa Periodismo Para Todos.

El analista político Julio Burdman señaló a La Tercera que esta "es una elección de demostración de poder electoral: no hay nada realmente importante en el plano legislativo. Es una gran competencia por demostrar quién sale primero. El gobierno quiere imponer una lectura "nacional" del resultado. Acá habrá ganado quien pueda imponer su propia lectura del resultado".

Entre los grandes ganadores de la noche figuraba Elisa Carrió, quien arrasó en la Ciudad de Buenos Aires, que Macri gobernó entre 2007 y 2015, con un 48%.

El gobierno esperaba obtener un alto respaldo, porque una victoria clara en las legislativas de octubre le hará las cosas más fáciles a Macri para impulsar reformas pendientes para el repunte definitivo de la economía. "Temas como la reforma laboral, previsional e impositiva requerirán de un acuerdo", señaló el analista Rosendo Fraga. Hasta julio, la inflación alcanzó un acumulado de 13,8% y un 21,4%.

"El gobierno prefiere que lo midan por los resultados nacionales en los que, confía, lo mostrarán robusto para la elección de octubre: más legisladores y, lo que es crucial, la casi certeza de la pérdida del quórum propio que ostentó el peronismo por muchísimo tiempo", escribió Ricardo Kirschbaum, editor general del diario Clarín. Desde hace 32 años que el antiperonismo no se impone en una legislativa.

A su vez, el analista Joaquín Morales Solá afirmó en su columna en el diario La Nación: "Las primarias obligatorias (...) serán la mejor medición que se haya hecho en el gobierno de Macri sobre el estado de la opinión pública".

Cristina con su nieto

Entre los comentaristas políticos que participaban anoche en acalorados debates sobre las primarias, había coincidencia en que si Cristina K no perdía anoche, sí lo hará en octubre.

La gran apuesta de la ex Presidenta es conseguir un asiento en el Senado, no sólo para desde ahí catapultar una nueva aventura presidencial, sino que para obtener fuero parlamentario, algo no menor considerando la serie de procesos que enfrenta en la justicia.

Figura controvertida, incluso este domingo provocó una amplia polémica ya que no acudió a votar a Santa Cruz. En vez de aquello, difundió una fotografía en su cuenta de Twitter junto a su nieto Néstor Iván, con quien, según dijo, analizó los resultados de las primarias.

Después Cristina K señaló que se trataba de una broma, pero a esa altura ya había recibido una lluvia de críticas, un mal presagio de lo que vendría después.

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