Mariana Aylwin: "Hay una candidatura de la derecha desplegada, y al otro lado no hay nada"

En los días posteriores a la junta nacional que la DC realizó el sábado pasado, cuando ya vislumbraba una fórmula para reinstalar su candidatura en medio de la etapa de reflexión que inició, Carolina Goic llamó por teléfono a la ex ministra Mariana Aylwin. En el diálogo, la abanderada le pidió que asuma una candidatura parlamentaria, algo que Aylwin viene evaluando desde hace varios meses, pero que, según sus cercanos, aún no la entusiasma completamente. Lo que sí dicen en su entorno es que si opta por competir, sería en el caso en que también lo haga el ex ministro Jorge Burgos. La definición se tomará en no más de una semana, y será clave para potenciar el elenco del partido con el que Goic buscará, además, fortalecer su propia campaña después de la crítica semana que debió enfrentar.

Aquí, Aylwin aborda el reimpulso que necesita la candidata de la falange y analiza el complejo panorama de la centroizquierda ante el despliegue de la candidatura de Sebastián Piñera.

¿Cómo evalúa el escenario actual de la DC?

Hay que poner un contexto: la crisis que están viviendo los partidos tradicionales, que también es un fenómeno internacional. No es muy distinto de lo que ha pasado en España, por ejemplo. Lo que pasó en la DC tampoco es muy distinto a lo que le pasó al PS. Estamos viviendo un tiempo de mucha confusión, en que para los ciudadanos la política no está respondiendo a sus expectativas. Hay un gran cuestionamiento, y se ha deteriorado la actividad política de propuestas, de convicciones, en fin. Ha primado una especie de cooptamiento de grupos de interés al interior de los partidos. Varios han hablado del sindicato de los parlamentarios. En el fondo, hay intereses por mantener espacios de poder. Incluso, se toman decisiones que después, los mismos que las tomaron se dan cuenta que han cometido un error. Eso es lo que pasó el sábado en la DC.

¿Cómo se refleja en la DC ese cooptamiento que usted menciona?

Hay una junta nacional y un consejo nacional que responden mucho a estos grupos de poder. Eso no es nuevo, pero pienso que hoy se ha agudizado. Y las discusiones antes tenían que ver con posiciones, más que con cómo ponemos a nuestra gente, en fin. Ahora hubo el interés de pasar colado a un montón de candidaturas votando de una sola manera.

La candidatura de Ricardo Rincón, básicamente…

No solo esa. Otras también, porque si se habría la de Rincón, era probable que se abrieran otras a revisión. La junta anterior decidió que no fueran candidatos quienes están formalizados o condenados. Aquí hubo errores de la directiva del partido y del consejo nacional, que no dimensionaron las consecuencias de tomar esta decisión.

¿A quién más cree usted que se le podría excluir de la plantilla parlamentaria? La comisión que revisará las candidaturas, liderada por Patricio Zapata, deberá proponer eso en los próximos días…

Esto se tiene que hacer con mucho cuidado y con coherencia con la aspiración de elevar el estándar ético que ha planteado la candidata. Entonces, no me voy a pronunciar por casos específicos. Ciertamente, es un proceso delicado, pero tengo confianza en que una persona como Patricio Zapata va a poder realizar ese proceso con el cuidado que se requiere.

¿Cree que se ha dimensionado qué tan lejos puede llegar esta crisis de la DC? ¿Cómo se corrige el camino?

La única manera de corregir el camino es tomar definiciones para fortalecer una identidad de partido de centro. Y esa tensión se mantiene. Todos podemos estar de acuerdo en privilegiar una alianza de centroizquierda, porque esa alianza fue muy potente: dio los mejores gobiernos de la historia de Chile. Pero cuando decimos centroizquierda, nosotros ocupamos el centro. Tenemos que asumir eso y que quisiéramos construir alianzas con la izquierda, pero no con cualquier izquierda sino con una democrática, moderna.

No con la IC y el MAS, entonces…

No con la IC y el MAS. Y quiero decir también que no con el Partido Comunista. La izquierda chilena se ha "sesentarizado" y ha renegado de su mejor época, que fue en los gobiernos de la Concertación.

¿Cómo explica usted ese pacto con la IC y el MAS?

No se sopesaron las consecuencias de un pacto de esa naturaleza. Se dijo que así se podían incluir independientes. Yo he preguntado cuántos hay, y he llegado a dos independientes. Entonces, la verdad es que creo que hay un sector del partido que quiso mantener esta alianza no por un motivo pragmático, sino que por no cortar definitivamente con la Nueva Mayoría. Pero es completamente incoherente. Nuestra candidata ha dicho que la Nueva Mayoría se izquierdizó, y resulta que llevamos una candidatura propia porque queremos fortalecer nuestra identidad. Y nos aliamos con dos partidos muy pequeños y que, además, son la ultraizquierda de la Nueva Mayoría. El MAS ha sido el partido financiado por Chávez. Al parecer. Esto nos hace un daño enorme. La gente nos ve como incoherentes, y la incoherencia en política se paga muy cara. Se han tomado decisiones con mucha liviandad… Esto nos va a costar caro si no lo resolvemos.

¿En qué pie queda la directiva de la DC después de todo este episodio?

La Democracia Cristiana, como partido, quedó debilitada. Y eso fue superado por la fuerza que tuvo Carolina Goic y el liderazgo que ejerció, que fue capaz de revertir eso. Pero, obviamente, estamos frente a un fenómeno más profundo y no de errores puntuales de unos u otros. Estamos frente a una crisis que evidencian los partidos tradicionales, y en la DC se ha mostrado con el síntoma Rincón, con el síntoma de hacer una alianza con la IC y el MAS. Esos son síntomas de una enfermedad más profunda, que tiene que ver con un debilitamiento de un proyecto de partido de futuro, con divisiones internas profundas… Se han mantenido unas diferencias internas que han hecho que la candidata haya estado muy ensimismada, teniéndose que preocupar de estos problemas internos y no hablándole al país. Creo que le ha pasado a todos los partidos, y la DC ha estado mirándose a sí misma y no a la sociedad.

En la DC dicen que Goic salió fortalecida…

Ella salió muy bien, pero si quiere potenciarse tiene que hacer una candidatura hablándole a la gente y despegándose de la DC.

¿Qué significa despegarse de la DC?

No seguir metida en los problemas internos, porque los problemas internos no se han resuelto. Y vamos a ver qué va a pasar después de noviembre.

¿Eso implica dejar la presidencia del partido? El ex ministro Edmundo Pérez Yoma dijo que ella debiera mantenerse en la conducción…

Si puede conciliar mantener un cierto control del partido con hablarle a la ciudadanía y no seguir hablándoles a los democratacristianos, bueno, puede ser, pero si no le recomendaría que ese tema lo delegara… Ella ganó esta pelea y salió fortalecida, pero el partido tiene problemas serios que no están resueltos. Y ella tiene que abocarse a ofrecerle al país una alternativa. No puede seguir con las alas cortadas por los problemas internos de la DC. El país está esperando propuestas claras. Aquí hay una candidatura de derecha desplegada, y al otro lado no hay nada. Hay una candidatura del Frente Amplio que le está consultando a las bases, hay una candidatura de la Nueva Mayoría que está juntando firmas y hay una candidatura de la DC que está preocupada de sus problemas internos. Entonces, esta es la coyuntura para hacer una propuesta que sea alternativa a la Nueva Mayoría, al Frente Amplio y a Chile Vamos, porque de lo contrario le estamos regalando nuestro electorado a Chile Vamos. Siempre he sostenido que de nuestro electorado una parte se fue a su casa, pero otra parte, cuando nos ven titubeando y sin liderazgos claros, se va a votar por la derecha… Cuando uno ve que Guillier no se atreve a decir que Venezuela ha impuesto una dictadura en Venezuela, o sea, yo quiero saber a quién va a defender Guillier: a la Asamblea Nacional, elegida por el pueblo, o a una Asamblea Constituyente hecha en una elección ilegítima, inconstitucional y sin garantías.

¿Cree que se le ha regalado terreno a Sebastián Piñera?

Aquí hay un voto anti Nueva Mayoría, y es mayoritario. Y si no hay una oferta de rectificar el rumbo de este gobierno en los partidos que apoyaron a la Presidenta Michelle Bachelet, bueno, esos votos se los estamos regalando a la derecha.

Esta semana hubo una reunión entre la Presidenta Bachelet y las autoridades DC del gobierno, después de que renunciara la subdirectora del Sernam, María Luisa España. La imagen era como una contención hacia la DC. ¿Usted tenía la impresión de que se podía producir una salida de más autoridades que militan en el partido?

Admiro a María Luisa España por su coherencia, pero siento que esa coherencia no ha existido. Cuesta mucho dejar los cargos públicos. Veo a autoridades, no a todas, atajando goles. Pero esos días hubo una égida del partido. Hubo mucha gente que renunció. Y muchos tuvimos que conversar con personas para decirles "cómo tomas una decisión tan apresurada". En ese momento estaba la sensación de que la DC había tocado fondo. Ahora, no creo que haya habido ministros pensando en renunciar.

¿Cómo evalúa el rol que ha jugado el gobierno en medio del escenario presidencial en el oficialismo? En la DC resintieron fuertemente que no fueran invitados al aniversario de la Reforma Agraria, por ejemplo…

La exclusión de la DC del aniversario de la Reforma Agraria no solo es tremendamente injusto, sino que es un acto poco amistoso del gobierno hacia la DC, porque la DC inició la Reforma Agraria.

¿Cómo se explica usted esa decisión de La Moneda?

Inexplicable. Lo encuentro un acto inamistoso.

¿Qué refleja, a su juicio? Se suma al apoyo de Angela Jeria a Guillier…

Lo de Angela Jeria es natural, no lo reprocho. Pero lo otro es un acto de gobierno de un tema en el que la DC tuvo un rol fundamental. Es un signo inamistoso.

¿Cree que La Moneda está jugada por Guillier?

Creo que La Moneda está jugada por intentar mantener la Nueva Mayoría, cosa que no le ha resultado, y también está jugada para que haya un candidato que mantenga las banderas del gobierno de Michelle Bachelet.

¿Se puede asegurar un apoyo recíproco entre la DC y Guillier para la segunda vuelta?

Hoy no veo que haya un proyecto compartido como para asegurar ese apoyo. Y una cosa es lo que deciden los dirigentes y otra cosa es lo que hace el electorado.

Usted forma parte de "Progresismo con progreso" al interior de la DC. ¿Qué va a pasar con ese grupo? Ustedes analizaron la opción de abandonar el partido…

No pretendemos ser un grupo de poder, pero sí seguir en la línea de ir perfilando un proyecto de futuro para el país. Los partidos son un instrumento para representar a la gente y proponer ideas. Cuando los instrumentos dejan de cumplir ese rol, bueno, uno tiene que buscar nuevos instrumentos. Entonces, es algo que se conversó. Pero vamos a apoyar a Carolina Goic, y aportaremos con ideas y diagnósticos.

Se quedan en la DC, entonces…

Mira, por el momento vamos a apoyar a Carolina Goic con todas nuestras fuerzas. Voy a ser muy franca. Hemos luchado muchos años por renovar el instrumento y por aportar desde la DC, pero también es mucha la gente que piensa que si no somos capaces de influir dentro de la DC, bueno, a nosotros nos importa influir al país. Así que es una alternativa. A mí me complica mucho, porque no me gustaría irme, pero, insisto: si un instrumento deja de servir las ideas que uno tiene y deja de representar a la ciudadanía, habrá que buscar desde dónde cumplir esa función.