Ministro Eyzaguirre ve riesgo por reducción en expectativas de inflación

Las lecturas de inflación más recientes, incluida la inesperada caída que anotó el IPC en septiembre, podrían reducir las expectativas de inflación, dijo el ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre.

Los responsables de las políticas son conscientes de que hay una tendencia a la baja en las expectativas, dijo Eyzaguirre en una entrevista en Washington. El ministro dijo estar seguro de que si eso se convierte en un peligro, las autoridades actuarán en consecuencia.

El banco central actualmente tiene un sesgo neutral en la política monetaria, lo que implica que no tiene planes inmediatos de subir o bajar las tasas. Sin embargo, la caída en la tasa de inflación a un mínimo de cuatro años del 1,5% el mes pasado alentó rumores sobre un quinto recorte de tasas este año.

Las expectativas de los mercados sobre la inflación dentro de dos años cayeron a un mínimo histórico en una encuesta reciente realizada por el banco central.

El Banco Central apunta a una inflación del 3%, con una banda de un punto porcentual en cada lado. El crecimiento de precios ha estado por debajo de ese rango objetivo en los últimos cuatro meses.

CRECIMIENTO

Un mayor optimismo sobre el panorama de crecimiento económico puede ayudar a evitar el arraigamiento de unas expectativas de inflación más bajas, dijo Eyzaguirre.

El ministro de Hacienda dijo que la recuperación está comenzando a cobrar impulso. Eso podría ser suficiente para esquivar la desinflación de las expectativas pero no se puede descartar la posibilidad de una reducción de la tasa de interés dentro de una recuperación, señaló.

Por ahora, la recuperación se centra en la demanda del consumidor y la acumulación de existencias, dijo Eyzaguirre. Sin embargo, con la mejora de la confianza empresarial y el alza del mercado bursátil, eso podría cambiar.

Eyzaguirre manifestó que la inversión se recuperará muy pronto y cree que ésta crecerá en 2018 tras una caída de tres años consecutivos. El sector de la construcción, que lleva aletargado más de un año, está comenzando a ganar impulso, lo que se suma a un incremento de la inversión minera por el alza de los precios del cobre.