Parroquia San Luis Beltrán, la "zona cero" del puntapié inicial

"Es tan simple el momento que lo que haremos es que, desde las 18.00 horas, en un escenario que instalaremos afuera de la iglesia, animaremos a la gente que irá llegando; rezaremos con ellos, la idea es poder hacer un momento de preparación para la llegada del Papa", cuenta Julio Larrondo, párroco del templo San Luis Beltrán, de Pudahuel.

Esta iglesia será la que dé el puntapié inicial a la visita del Papa Francisco, una vez que aterrice el próximo lunes 15 en el Aeropuerto Internacional de Santiago, y se traslade al barrio de San Pablo. Será en este lugar donde el Pontífice abordará el Papamóvil para comenzar a recorrer las calles de la capital.

Ubicado en pleno corazón de Pudahuel, el recinto cuenta con una reja que marca el límite con la calle, además de un jardín principal y unas bancas de cemento para los feligreses. En su frontis cuelga un lienzo que da la bienvenida a Francisco. La emoción de la visita papal ya se siente.

"Es estupendo que tenga una parada aquí en la comuna. Sería ideal participar de alguna actividad, pero habrá mucha gente, así que será difícil", dice Isolina Rojas, vecina del sector.

El sacerdote Larrondo cuenta que fue el mismo cardenal de Santiago, Ricardo Ezzati, quien en septiembre les dio la noticia de que Francisco comenzaría su gira en la Iglesia San Luis Beltrán. "Fue un momento de mucha alegría, después de agradecimiento y de sentirnos bendecidos, por ser el primer lugar que visite el Papa", recuerda.

Uno de los anhelos de la comunidad es que el Pontífice rompa el protocolo y pueda ingresar a la iglesia. "Ojalá cuando llegue, al cambiar de vehículo, junto con saludar a la gente, pudiese entrar a nuestra comunidad y visitar la tumba de don Enrique Alvear, que es el Obispo de los pobres, que está aquí y vivió en esta parroquia, donde desarrolló toda su labor social junto a la gente", señala el párroco.

La tumba de Alvear está a pocos metros de la entrada, a un costado del templo. Desde 2008 que los restos del otrora obispo auxiliar de Santiago y vicario de la zona oeste yacen en este lugar, que actualmente cuenta con una placa de piedra con la fecha de su nacimiento y defunción, junto a un jarrón con flores.

El párroco dice que de poder hablar con Francisco, "me gustaría contarle que es una comunidad que vive en medio de los dolores que significa la pobreza, los dolores de la falta de trabajo, el alcohol, la droga, y lo que conlleva que de repente hay dificultades en las familias; pero que, sin embargo, en medio de ese mundo, la comunidad se mantiene viva y quiere seguir anunciando con esperanza la fe en Dios y en nuestra Iglesia".

Según vecinos, comerciantes del sector y feligreses, hay alegría y entusiasmo en la comunidad. "Pienso que va a ser muy bonito y algo muy especial para nosotros. Quiero que Francisco vea a hartos creyentes, muchos católicos. Lamentablemente, será difícil verlo en directo, espero sí mirarlo aunque sea por la tele", opinó Cristina Contreras, otra de las integrantes de la comunidad.

En el exterior de la iglesia se está pavimentando la calle, que antes era de piedra, y en el interior ahora se trabaja solo en arreglos menores. "Hemos tratado de ser lo más sencillos posibles, no hemos querido mostrar algo que no es. Esta es nuestra iglesia, nuestras bancas, nuestra vida. A lo más estamos haciendo unas manitos de gato, pero mínimas. No hemos pintado, no hemos puesto jardines, hemos dejado tal como es, porque lo importante es la fe. Después, se va el Papa de aquí y tendremos que seguir viviendo y pagando las cuentas", señala Larrondo.