Pizzi descongela el doble seis

La Roja prepara a nivel del mar y humedad el duelo en altura del jueves ante Ecuador. En la mente del técnico está un once titular que pone fin al volante único de contención: Tucu Hernández se ubicará junto a Díaz.




No ha sido fácil el transitar de Juan Antonio Pizzi junto a la Selección en las Eliminatorias. De cuatro partidos, la Roja apenas ganó uno (como visitante frente a Venezuela) y hoy peligrosamente ocupa el puesto séptimo en la clasificación. Un hecho sorpresivo si se toma en cuenta que en junio pasado el combinado levantó su segundo trofeo continental consecutivo, dejando una imagen futbolística sobre el final del torneo que hacía mirar con tranquilidad el camino a Rusia.

Pero todo se complicó tras la última serie de partidos en Sudamérica. La caída ante Paraguay y el empate frente a Bolivia encendieron las alarmas desde lo inidividual, lo colectivo y también lo numérico. Pizzi y su cuerpo técnico asumieron el golpe que significó esa pobre cosecha de puntos. Por eso el duelo a jugarse en Quito el próximo jueves ante Ecuador reviste tintes trascendentales. Primero porque se juega ante un rival directo. Y segundo porque un mal resultado ahondaría las dudas que se vienen instalando en torno a la Selección en las últimas semanas.

“Sabemos que no podemos repetir actuaciones como ante Paraguay y Bolivia. Y desde ese punto de vista, creo que ahora sí estamos en mejores condiciones. Sobre todo porque todos los jugadores vienen con ritmo de competencia, lo que en las dos jornadas anteriores no ocurrió”, expresan desde el cuerpo técnico, en la víspera de lo que será el inicio de la preparación a nivel del mar y con humedad, en Guayaquil, con miras al duelo en altura con Ecuador. La Roja se juntará directamente en esta ciudad antes de subir el jueves a primera hora a la capital, para enfrentar al seleccionado que dirige Gustavo Quinteros.

Pizzi y sus colaboradores hacen hincapié en el alza futbolística de sus principales figuras. La situación de Alexis Sánchez hoy es diametralmente opuesta a la que vivía a fines de agosto. Vidal tenía apenas dos partidos oficiales en cl cuerpo. Marcelo Díaz hoy está recuperado y hasta Vargas ha sumado minutos, más allá de que este último sábado no vio acción con el Hoffenheim.

Pero también destacan un nombre con el que casi no contaron en la última convocatoria y que sólo llegó de emergencia. Pablo Hernández, volante del Celta, y quien en la Copa Centenario sufrió una grave lesión que lo tuvo casi dos meses fuera de las canchas, es considerado por Pizzi como uno de los hombres que tendrá que asumir una gran responsabilidad en Quito. La idea del técnico es variar el dibujo táctico que venía mostrando, sacando a uno de los nominales extremos, para ubicar al tucumano en la zona media, jugando al lado precisamente de Díaz, con quien comparte camiseta en España. Es decir, el fin del contención único para sacar del refrigerador la fórmula del doble seis.

“Sabemos que físicamente debemos tomar algunos reguardos por tratarse de un partido en la altura, pero en ningún caso Chile irá a defenderse. La idea es controlar el partido desde la posesión, para no tener que estar intercambiando ataques con Ecuador, que aunque es cierto hoy tiene mayoría de jugadores del llano, sigue marcando diferencias en casa”, sostienen desde el cuerpo técnico.

Por eso para Pizzi el ingreso del Tucumano resulta importante para primero administrar bien el balón. La idea es que ese primer pase no siempre sea de Díaz, porque le supondría un enorme desgaste. Asimismo, tanto Aránguiz como Vidal estarán más cerca de los delanteros, con más frescura a la hora de intentar hacer daño en la zona final. Los dos delanteros seguirán siendo Vargas y Sánchez.

Roco, derecho

Un viaje hacia el 4-2-2-2 más próximo a las ideas originales de Pizzi que a las que ha empleado la Selección en los últimos tiempos.

Quizás sí la sensible baja de Medel sea hoy el principal dolor de cabeza del técnico. La ausencia del Pitbull, todavía suspendido por los insultos en contra del árbitro Pitana en Asunción,  no siempre ha sido bien cubierta. Estadísticamente, Chile gana menos de la mitad de los puntos sin el hombre del Inter en la cancha. Y eso es un dato que se sostiene desde hace casi una década.

Pero así como existe unanimidad sobre el peso futbolístico y anímico de Medel, en la Roja tienen plena confianza en la evolución que ha venido teniendo Roco. Además, con Jara en el equipo, el actual defensor del Cruz Azul de México ocupará el costado derecho de la zaga, lo que facilitará enormemente su salida con el balón.

De hecho, en el cuerpo técnico tienen claro que los problemas que exhibió Roco en los últimos partidos cuando tuvo que salir jugando, se debieron casi exclusivamente al cambio de perfil, que simplemente no lo maneja. Ahora Jara volverá a la zona izquierda, lo que para Pizzi supone también un buen respaldo defensivo para todo el equipo. Los laterales seguirán siendo Isla y Mena, aunque van a evaluar en estos días en Guayaquil la condición de Beausejour, que no ha tenido mucha regularidad en la U.

Ayer comenzaron los entrenamientos de la Selección en Ecuador. El estadio Monumental de Guayaquil será el escenario de las prácticas comandadas por Pizzi. La idea futbolística ya está en la cabeza del técnico para intentar romper la racha negativa de la Roja en Ecuador: desde que se instauró el sistema de todos contra todos, Chile nunca ganó en el Atahualpa. Apenas un empate en 1997, con aquel recordado cabezazo de Salas. Después, sólo derrotas. El jueves se escribirá otra historia.

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