Rodrigo Valdés: "La situación es lo suficientemente grave como para que se refleje en las cifras"

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El ministro de Hacienda reconoce que la emergencia impactará en la macroeconomía, aunque espera amortiguarlo con las medidas de ayuda. Advierte que es posible que en enero se vea un nivel más bajo de producción aunque debiera darse una normalización rápida por la reconstrucción.




Ayer, el gabinete económico del gobierno -conformado por los ministros de Hacienda, Rodrigo Valdés; de Economía, Luis Felipe Céspedes, y de Trabajo, Ximena Krauss- se desplegó en la Región del Maule, una de las regiones más afectadas por los incendios, con un objetivo: definir los planes de contingencia para contener los impactos negativos de la emergencia, especialmente en materia de empleo, que es "lo más importante", como reconoce el propio Valdés.

En terreno, el jefe de las finanzas públicas insiste en que es muy pronto para estimaciones, aunque adelanta que si todo terminara hoy, el efecto macroeconómico sería acotado e incluso se podría ver una normalización rápida, dado el proceso de reconstrucción detrás de estos fenómenos.

¿Cuál es la evaluación de los daños que ha dejado la emergencia?

Hay daños en distintas industrias, por suerte no son generalizados, sino que porcentajes de empresas que aún no tenemos precisión. Es pronto para saber el impacto macroeconómico de esto, pero sin duda vamos a tener ciertos efectos, que vamos a amortiguar con las distintas líneas de ayuda que tenemos. Para el empleo, que es lo más importante, hay subsidios de retención de puestos laborales, para que las empresas puedan continuar funcionando.

¿Cuándo tendrán un balance?

La prioridad es terminar de apagar los fuegos. La situación está más controlada que hace dos días, pero la gente está más dedicada a la coordinación de la guerra contra el fuego que a otras cosas. Estamos haciendo catastros, pero aún es muy pronto para hablar de efectos. Espero que en los próximos días tengamos una idea más precisa de los efectos fiscales y macroeconómicos. En todo caso, como siempre pasa con las calamidades, al corto plazo hay una reconstrucción detrás, por lo tanto, es posible que se vea un nivel de producción en enero más bajo, pero un par de meses después ya debiéramos ver cierta normalización.

¿Se podría hablar de un efecto rebote, como lo que ocurrió con el terremoto del 27/F?

Menos intenso. Pero, en general, cuando uno ve catástrofes como ésta, se tiene la expectativa de que la actividad de la región se normalice después de un periodo.

¿Cuánta gente se apoyará con el subsidio de retención de empleo?

El ministerio del Trabajo y de Economía están desplegados haciendo los catastros y las fichas respectivas, porque aquí es muy importante evitar que se mal usen esos instrumentos.

¿Podría aumentar el desempleo en las zonas afectadas?

Hay mecanismos para amortiguar ese efecto. Además, también tenemos los efectos directos de la reconstrucción. Vamos a ver en las cifras algún efecto, pero es pronto para dimensionar.

¿Efecto en el PIB, directamente?

Va a depender de cuándo terminen los incendios. Pero hasta ahora el efecto en el PIB no debería ser tan significativo. Mi entendimiento es que la situación es lo suficientemente grave como para que se refleje en las cifras.

¿Hay definición del financiamiento para esta situación?

Hay distintas alternativas. Tenemos los Fondos Soberanos, con recursos significativos y que podríamos utilizar. También existe la posibilidad de usar saldos de caja que hoy no se están utilizando y hacer un esfuerzo desde ese lado.

¿Y qué porcentaje de esos fondos se podría utilizar?

Dependerá de cuánto nos cueste esto. La primera línea siempre es reasignar, pero la Presidenta Bachelet nos ha instruido claramente que tenemos que buscar recursos que van más allá de la reasignación y esos recursos existen. ¿Cuánto vamos a usar? Primero debemos tener claro la dimensión de la emergencia. Decir la plata que vamos a usar sin saber la magnitud del problema es poner la carreta delante de los bueyes.

¿En qué va a consistir la iniciativa de reforestación inteligente? ¿Se podría hablar de responsabilidad de las empresas forestales?

No hay indicios de que las forestales tengan una responsabilidad particular en esto. Pero hace algunos años dejamos de tener el Decreto de Ley 701, que llevó a grandes plantaciones, pero que llevó a un tipo de plantaciones en el que se privilegió excesivamente un tipo de árboles versus otros. Uno puede buscar mezclas más inteligentes y tenemos que preocuparnos más del agua.

¿La industria forestal tenía muchas libertades?

No tengo la suficiente evidencia para decir que un tipo de especie es más segura que otra, lo que sí me queda claro de esta visita es que uno podría pensar en tener más medidas de seguridad en las plantaciones y sobre todo tener un manejo de las plantaciones que permita una mejor madera y un mejor valor agregado.

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