Crisis en la DC



SEÑOR DIRECTOR

No fui hombre de política, pero mantuve mi militancia y acción de base en la DC por 50 años. Ahora se habla de "crisis de la DC". Se la adjudica a falta de definiciones, a divisiones internas o alianzas equivocadas. Pero la realidad es otra que nadie enfrenta: las ideas que nacieron y triunfaron hace 80 años hoy no tienen sentido. El tiempo mata las buenas ideas cuando se alejan de la realidad.

La DC nace en un momento específico. Terminada la guerra hay un gran triunfante: la Unión Soviética y el comunismo se expande en Europa y Asia. En Italia, Francia y Alemania los partidos comunistas amenazan triunfos eleccionarios que pueden matar la democracia europea. La Iglesia Católica advierte una amenaza atea que pone en peligro su influencia religiosa y política. Nuevas encíclicas presentan una alternativa diferente: un camino intermedio entre democracia capitalista y marxismo: hay filosofía y respaldo ideológico. Jacques Maritain ofrece un mundo mejor, basado en democracia, comunitarismos, cooperativismos y capitalismo trabajando juntos para el bienestar social. Aparecen partidos demócrata cristianos en el mundo y Chile, logrando cambios importantes. Los partidos comunistas pasan a ser minorías en las democracias europeas.

Luego advertimos que ni los comunitarismos ni los coorporativismos llevan desarrollo. Queda solo una disputa: la economía social de mercado europea, básicamente liberal y la social democracia. Una busca la igualdad mediante un estado fuerte, que dirija el mercado y la otra sostiene que solo el crecimiento liberal puede lograr la igualdad. Desgraciadamente, ninguna tiene relación con nuestra ideología inicial, porque no se necesita. El comunismo dejó de ser amenaza. Lo derrotó tanto nuestra ideología como su propia ineficacia.

Hoy nuestra DC se debate buscando congresos ideológicos. No los logrará. Pacta con antiguos enemigos que, sin relevancia, aún idolatran a dictadores como los Castro y los Kim. La DC cumplió su papel. La historia se lo reconocerá, pero hoy no tiene nada que ofrecer.

Roberto Munita Herrera

Abogado

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.