Marcha estudiantil



SEÑOR DIRECTOR

Las expresiones emitidas por dirigentes del movimiento estudiantil después de la última marcha de la Confech dejan claras ciertas falencias en el discurso que, como representante, me siento en el deber de responder.

Banderas como el fin al lucro se plantean a fin de convocar a quienes alguna vez marcharon el 2011, marcando una oposición al gobierno y buscando imponer una visión sobre nuestro modelo educativo; un modelo donde los privados no son un aporte, sino una piedra en el zapato.

El fin al lucro ya es una realidad. La marcha del Confech fue convocada con antelación al fallo del Tribunal Constitucional, que no cambia el efectivo fin al retiro de utilidades por parte de los controladores que establece el proyecto de ley próximo a ser promulgado, lo que celebramos. El cuestionamiento continúa y debemos hacernos cargo de los múltiples problemas que aquejan al sistema educativo.

No podemos quedarnos solo en cuestionar y tensionar. Si como representantes queremos volver a hacer sentido, es necesario sincerar el debate y replantear las prioridades: infancia y educación inicial, acceso o calidad no pueden seguir quedando fuera de la discusión.

La Confech debe renovar las banderas que históricamente ha representado, aceptar la disidencia y dialogar con quienes piensan distinto. De lo contrario, la convocatoria seguirá siendo pobre y su representatividad cuestionada.

Magdalena Lira Mayo

Presidenta Centro de Alumnos de Derecho UC

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