Modificaciones a la ley migratoria

SEÑOR DIRECTOR

El Presidente Piñera ha dado a conocer un conjunto de medidas migratorias con un sentido de urgencia y visión de Estado. La pretensión del gobierno anterior de instalar un enfoque asistencialista, desprovisto de una necesaria mirada de Estado, impidió avanzar hacia una nueva legislación migratoria. A esto se sumó la designación de operadores políticos de escasa jerarquía técnica para liderar políticas públicas en fenómenos de tanta relevancia social. El gobierno ha reflotado su propuesta de ley de 2013, la cual, con nuevas indicaciones se discutirá en el Congreso para alcanzar una migración segura, ordenada y regular. Las medidas anunciadas muestran la preeminencia de la visión pragmática unitaria del Estado por sobre la visión utópica internacionalista de una movilidad humana sin fronteras. El desafío será conservar la unidad reconociendo e incorporando la diversidad cultural.

Era inevitable separar el ingreso por hacer turismo con los fines de residencia. La creación de la visa temporaria de oportunidades que debe obtenerse fuera de Chile es un paso en la dirección correcta. La visa consular para ciudadanos haitianos es una eficiente herramienta y evita incrementar el desordenado e inseguro flujo de personas. Se complementa con una visa humanitaria de reunificación familiar. Y la visa de responsabilidad democrática es un positivo reconocimiento a la compleja situación social que vive Venezuela.

En suma, el gobierno ha dado muestra de vitalidad y audacia en materia migratoria. Resta concordar políticamente un nuevo marco normativo. Y, por cierto, prospectar las necesidades demográficas y de talento humano para planificar los flujos en el marco del respeto a los derechos humanos del migrante. Sorprendentemente, ha sido un gobierno que cree en el libre mercado como motor de desarrollo el que ha puesto al Estado en un rol conductor en esta crucial apuesta para el Chile del futuro.

Lorenzo Agar Corbinos

Doctor en Sociología