Sub 20: Con camisa de fuerza




Chile suma cuatro puntos y las opciones de clasificar a los octavos de final del Mundial Sub 20 son claras. Sin soberbia, todo hace pensar que este cuadro no debiera tener dificultades para llegar al cruce de los 16 mejores, donde el destino empieza a mirar la gloria.

Una victoria sobre Egipto en el estreno y el empate de ayer frente a Inglaterra con un sabor agridulce. Brayan Rabello estuvo dos veces muy cerca de anotar el 2-1, incluso estrelló un derechazo en el travesaño, pero Darío Melo exhibió buenos reflejos en la portería y salvó la derrota.

¿Fue superado en el trámite Chile? Ante Egipto, no. Surgieron problemas en el funcionamiento del costado izquierdo, pero en el complemento se resolvieron y los norafricanos casi no patearon al arco. Con los ingleses el tema fue diferente. El partido siempre fue trabado, sucio -no porque hubiera violencia-, con demasiadas imprecisiones y sólo Rabello mantenía la claridad necesaria, bien cubierto por el regular César Fuentes. Los defensores centrales Igor Lichnowsky y Andrés Robles respondieron y los marcadores de punta Felipe Campos (bien en el descuelgue, tibio en la marca) y Mario Larenas no extraviaban el orden.

¿Dónde estuvo el problema? En la carencia de fluidez que este equipo extravió desde su clasificación en Mendoza. En el Malvinas Argentinas el esquema de cuatro zagueros, dos volantes de recuperación, tres para salida (dos de ellos bien abiertos) y un punta, funcionó. A veces los rivales contrarrestaron, en otros momentos la indisciplina cambió los papeles al quedar en inferioridad numérica, pero la sensación era que, cuando se cruzaba la mitad del campo, algo podía pasar. En la fase inicial, Diego Rubio cumplió una gran faena táctica y después terminó diluyéndose por la fatiga. Los intérpretes respondían.

En Antalya el panorama varió con el ingreso de Angelo Henríquez. Ubicado abierto en la derecha, no siente la función de volantear, cuando retrocede el arco rival le queda muy lejos y la raya lo aprieta. Es cierto que con Campos tuvieron algunas incursiones llamativas, pero fueron mérito del lateral de Palestino, quien demuestra que conoce el oficio de lateral.

Nadie dice que el ariete formado en la "U", quien por algo fue adquirido por el Manchester United, quede fuera. Sería un desperdicio. La definición es de la banca. O juega con un alero natural y sacrifica a Henríquez o Nicolás Castillo u opta por utilizar a los dos atacantes, cuyas características físicas no abundan en nuestro medio.

Después de 180 minutos la sensación es que urge una vuelta de tuerca para aprovechar el enorme potencial que otorgan Henríquez y Castillo, sobre todo con un habilitador de la categoría de Rabello. Aunque eso implique modificar el tablero del entrenador. Chile casi no ha generado situaciones de riesgo, salvo por remates de media distancia o balones detenidos, algo que abundó en la expedición cuyana.

Alguien argumentará que Marcelo Bielsa y Jorge Sampaoli, por mencionar dos técnicos que imponen una matriz a la que los protagonistas deben adaptarse, carecían de flexibilidad en el esquema. Discutible, porque la movilidad de los futbolistas es la que hace la diferencia. En la derrota 3-0 frente a Paraguay de 2007, se dijo erróneamente que Humberto Suazo quedó atrapado en la derecha, a pesar de que dispuso al menos de dos situaciones clarísimas llegando por la izquierda. El rosarino lo enrostró en esa dura rueda de prensa.

Por ahora los resultados acompañan en Turquía, pero no sería un despropósito dar una vuelta de tuerca al planteo para aprovechar a los dos tanques. No vaya a ser que nos atrape una camisa de fuerza…

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