El dilema de la UC por Canal 13
<P>La Iglesia, incómoda con la programación de la señal, impulsa la idea de vender o disminuir su participación en la propiedad. El debate ya se instaló en el Consejo Superior frente a la posible apertura bursátil de la estación.</P>
Antes de la inauguración del año académico, que reunió ayer a alumnos, profesores y autoridades de la Universidad Católica, el rector Ignacio Sánchez tenía preparado un mensaje para la comunidad de la casa de estudios. "La universidad decidirá de manera libre y meditada, en los próximos meses, su participación en este medio (Canal 13), que esté de acuerdo con los principios, valores y misión de la institución".
Se trata del dilema que la próxima salida a la bolsa de la estación ha significado para la UC, y también para la Iglesia. Para ambas instituciones, hay dos aspectos por aclarar, antes de definir una postura frente al futuro aumento de capital de Canal 13, informado a comienzos de año a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), y con el que la estación (cuyo socio mayoritario es Andrónico Luksic) pretende sumar recursos.
El primero de ellos tiene que ver con la reunión de directorio de Canal 13, prevista para este viernes 29, instancia en la que la UC posee cuatro integrantes y donde se abordarán las condiciones del negocio que el canal definió para su estreno en la rueda. En otro plano, en la casa de estudios también están a la espera de conocer cuál será la suerte del proyecto de ley sobre la TV digital, que aún permanece en el Congreso.
Si bien la UC no se opuso a explorar opciones para la salida al mercado de Canal 13 -decisión adoptada a fines de 2012-, los motivos por los que la universidad se fuerza a tomar una decisión sobre su futuro en el canal se producen por el debate interno que existe sobre la programación de la señal.
Fuentes de la Iglesia y la UC coinciden en que al interior de ambas instituciones, un amplio sector considera que la parrilla de Canal 13 -especialmente los programas de farándula y los reality shows- es ajena a la sensibilidad católica y académica, que creen, debe representar un canal ligado a la UC.
En ese sentido, la postura más crítica ha sido la de algunos obispos y sacerdotes, que ven en la apertura a la Bolsa una oportunidad para desligarse definitivamente del canal. Del otro lado, hay una facción minoritaria que cree que el vínculo canal-universidad no debe romperse y que se debe tratar de buscar una programación más acorde a la misión de la UC. Un tema muy difícil de conseguir con sólo el 33%.
Por eso, frente a la encrucijada impuesta por la salida a la Bolsa, las diferentes posturas están articulando su manera más eficiente para influir en esa decisión y en las reuniones donde se analizará el tema. Y todas las voces apuntan al rector Ignacio Sánchez como la persona que deberá guiar ese debate y ejecutar la decisión que finalmente se adopte.
Una alta fuente eclesiástica dice que el rector ya sabe que la Iglesia, en su mayoría, está por desprenderse o disminuir el 33% de propiedad que mantiene de la televisora desde 2010 (cuando Luksic compró el 67%). Que nadie está por comprar más acciones.
Por el lado académico, el tema debe resolverse en el Consejo Superior de la UC -integrado por el rector, los vicerrectores, decanos y representantes de los profesores y estudiantes. La Tercera contactó a varios de estos miembros, de un total de 30, quienes señalaron que entienden la posición de la Iglesia y comparten sus aprensiones, a la vez que consideran que el factor financiero es muy relevante antes de decidir desprenderse totalmente de la participación en el canal. Especialmente, frente a los buenos resultados financieros del 2012: el canal fue la única señal que aumentó sus utilidades respecto del año anterior. "No es que nos opongamos a vender la totalidad de las acciones, sólo que debemos buscar el mejor momento", dice una alta fuente de la estación. El espíriu es rentabilizar cualquier decisión para financiar otros proyectos de la UC a futuro.
En efecto, el repunte del canal en 2012 significó que a julio de ese año, la estación obtuviera utilidades por $ 1.500 millones y que a comienzos de 2013, liderara con 8,8 puntos de rating, el promedio de audiencias de la televisión abierta.
En 2012, año en que la Conferencia Episcopal presentó una carta pastoral resaltando a la familia y la educación como pilares para el desarrollo, los análisis de la Iglesia fueron críticos sobre cómo esa visión se manifestaba al interior del Canal 13.
Desde agosto en adelante se hizo patente la incomodidad con la programación, y el tema fue planteado en las reuniones de directorio por los representantes de la UC: Rodrigo Alvarez, Marcelo von Chrismar, Silvia Pellegrini y Patricio Donoso.
En septiembre de 2012, el arzobispo de Santiago y Gran Canciller de la UC, Ricardo Ezzati, se reunió con un recién asumido Nicolás Eyzaguirre: "La Universidad Católica, aunque en forma muy minoritaria, es parte de este canal y por tanto nos interesa que la visión cristiana del hombre y la sociedad puedan estar presente", dijo al salir del encuentro.
En noviembre, Ezzati criticó los contenidos y dijo que "no estamos educando a la familia cuando nuestros programas presentan una realidad de la familia y la ensalzan", ya había abordado el tema con el rector Sánchez.
Por eso, cuando a fines de 2012 el directorio de Canal 13 aprobó el aumento de capital para financiar los requerimientos de la tv digital, la Iglesia sintió que era el momento de buscar un canal propio y acorde a sus objetivos, incluso en la señal digital. La situación fue abordada en el Consejo Superior de la UC, tras lo cual Sánchez envió una carta a la comunidad universitaria, señalando que frente a la apertura a la Bolsa la UC "decidirá si mantiene su participación, o busca otra alternativa comunicacional más afín a su misión".
La postura de la Iglesia abrió el debate en los diversos estamentos de la universidad. Según una fuente que conoce esas conversaciones, ya hay ciertos decanos -ligados al mundo industrial y económico- que han fijado una postura contraria.
Por eso han dicho que es necesario un estudio exhaustivo de la situación para analizar los escenarios posibles, para aprovechar de la mejor manera el 33% de propiedad y capitalizar los recursos que provengan de eso.
Según explica una fuente universitaria, a fines de abril, o comienzos de mayo, el tema debiera comenzar a ser tratado en las sesiones de Consejo Superior.
Una de las alternativas que se baraja es la creación de una comisión que estudie los aspectos académicos, legales y operacionales del proceso, de modo que todos los miembros voten con todas las cartas sobre la mesa.
En materia de tiempos, al interior de la universidad aseguran que es una decisión que debe tomarse en el mediano plazo, considerando que la SVS puede demorar entre dos y seis meses en aprobar la operación. Una alta fuente de la UC asegura que en el segundo semestre de 2013 el tema será zanjado.
Desde la vereda de Andrónico Luksic, propietario del 67% de Canal 13 y donde califican como "muy buenas" las relaciones con la UC, siguen de cerca los pasos que dará el plantel, pero aseguran que la decisión es exclusiva de la universidad y que esperarán las conclusiones de la reflexión anunciada por la casa de estudios.
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