"Fue un impulso sacarla a ella afuera. Es algo que da vergüenza". Cristián Hermosilla, el jinete que el pasado domingo laceó y arrastró por varios metros a una joven activista de 16 años en la medialuna del Estadio Nacional, recordó con esas palabras lo sucedido aquella jornada.

En entrevista con Canal 13, relató que "en un principio fue bornear el lazo para asustar (...). Luego, cuando llegó su amiga y la botó, yo paré".

Hermosilla agregó que "si tengo que ir a su casa, voy a pedirle disculpas y explicarle de qué se trata el rodeo".

Respecto de la razón de protesta que ese día protagonizaron cinco adolescentes, el jinete señaló que "ellos no saben que el animal no se maltrata. Eso es lo que da rabia".

Consultado por las acciones legales presentadas por las familias de las afectadas, respondió que "no creo que sea para querella, porque ellos estaban provocando. Ellos estaban en la medialuna, el lugar de mi trabajo (...), pero la reacción que yo tuve no justifica lo que hice".

Por su parte, Víctor Acevedo Rubio, locutor oficial de las más importantes competencias de rodeo de la zona central y a quien el domingo pasado se le oyó arengar al jinete que arrastró a la activista, señaló ayer que "creo que me dejé llevar por la algarabía del momento y la molestia del público ante la intromisión de los jóvenes, lo siento".

Un videoaficionado registró las palabras de Acevedo aquella jornada: "¡Déle a la gorda... sáquela p´afuera, el deporte es de nosotros, sáquela p´afuera nomás".

"En verdad, mis palabras eran para dejar claro que nos molestó lo que hicieron, porque sigo pensando que el rodeo es un deporte noble. Creo que ellos no tenían derecho a ir y meterse así a la medialuna, eso también fue violento", añadió.

En tanto, hasta el 8° Juzgado de Garantía llegaron ayer los apoderados de las dos menores para presentar una querella por lesiones y amenazas. Ahí, Francisco Palomo, padre de C. P., dijo que "estaba al tanto de lo que iba a hacer mi hija, estoy orgulloso de ella (...) vamos a seguir adelante con la querella, hay que darles un castigo a estas acciones, no se pueden dejar pasar".

Victoria Cortés, madre de Maira la otra adolescente que habría resultado lesionada, afirmó que "no sé si son huasos de verdad, creo que es inhumano lo que ellos hicieron con las niñas. Sólo basta imaginar qué habría pasado si el lazo se les hubiese enganchado del cuello".