El desafío de Claudio Bravo

El capitán de la Roja arrancó la temporada sentado en la banca. Habrá que ver cómo aprovecha las opciones que le dé Guardiola.



No será esta una temporada fácil para Claudio Bravo en el arco del Manchester City con la llegada del brasileño Ederson Moraes. Tampoco la tuvo sencilla en su primer año vistiendo la camiseta citizen. El fútbol inglés, la Premier League, se juega a otra velocidad. Cualquier equipo chico le pude ganar o hacer partido a uno grande, hay seis o siete cuadros que parten la temporada con opciones de campeonar y en el caso del City de Josep Guardiola, las precauciones defensivas son casi inexistentes.

Si se analiza en detalle la ingrata temporada pasada, el portero no tuvo responsabilidad en la mayoría de los goles que le convirtieron, ni protagonizó errores groseros. Su problema fue que simplemente atajó poco. Le llegaban y le convertían. Empezó la presión de la prensa inglesa, las críticas despiadadas de los medios sensacionalistas y la pérdida de la titularidad. Después la mala suerte: cuando recuperó el puesto, una lesión lo sacó otra vez de la portería.

Ahora empieza de cero y la llegada del joven Ederson (24 años) desde el Benfica por 47 millones de dólares le puso cuesta arriba las cosas al comenzar como titular la temporada en la victoria ante el Brighton. Situación esperable porque Bravo se integró a la pretemporada del equipo a última hora.

¿Qué se le viene a Bravo? ¿Perderá continuidad y pasará la mayor parte del tiempo en la banca? Difícil, independiente de que no juegue la Premier están la Copa de la Liga, la FA y la Champions League. Es decir, habrá opciones para que el chileno ataje. El tema es si contará con la confianza de Guardiola para competirle a Moraes. Mucho dependerá de cómo aproveche el chileno las opciones que tenga, por pocas que sean.

En su extraordinaria trayectoria en el extranjero, Bravo ya sufrió con la suplencia. Fue en la temporada 2007-2008 en la Real Sociedad. Aquella vez, Asier Riesgo se quedó con el arco y el chileno tuvo que remar desde atrás. ¿El resultado? Bravo se sobrepuso, recuperó la titularidad y terminó fragüando una carrera que le permitió llegar hasta el Barcelona.

Hay que confiar en el 1 de la Roja; seguro la va a pelear. Tiene clase y expriencia para revertir la situación y triunfar en la liga más competitiva del mundo. Será un lindo desafío; otro más para el mejor arquero de nuestra historia.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.