La Francia de ébano

Pogba


Francia se lleva la corona. No esa Francia aristocrática y versallesca, sino la de rostro color ébano. Esa de los suburbios de las grandes ciudades de inmigrantes con apetitos de obrero. Esta selección que dejó contenta, literalmente, a moros y cristianos.

Claudio Tamburrini, filósofo, dice que es "mejor que el equipo del pueblo gane, aunque esté lleno de extranjeros, que tener un equipo étnicamente 'puro' que no le gane a nadie".

La clave se llama Dirección Técnica Nacional.

Un proyecto de desarrollo del fútbol que inserta una multiculturalidad rica en el ámbito foráneo y migratorio.

Bajo un proceso permanente y un producto adecuado se logran resultados. Esta es la clave. Ya no se trabaja solo el aspecto técnico, ahora se enfocan en el estado mental y la inteligencia del juego. Jugar a la pelota lo hace cualquiera, jugar el juego del fútbol, pocos.

Estos jugadores de color antes de pisar una cancha, primero pasan por la biblioteca municipal del barrio a adquirir cultura y conocimiento.

¿Qué hizo Deschamps con esta selección? Eligió jugadores con personalidad, juventud, actitud y cualidades individuales y colectivas. No fue fácil. En su debut, vendió más dudas que ilusiones.

¿Qué marcó la diferencia? El trabajo en equipo y mucho contragolpe con fuerza explosiva, técnica rápida, recuperar el balón (velocidad del balón), control del tiempo (ritmo) y velocidad de transición.

Desterró el abuso de la posesión del balón. Puso fin a la majadera intensidad alta. Jugó con cuatro en el fondo y tres mediocampistas mordedores pero de alta técnica. Se utilizó el juego largo preferentemente y sin presionar en campo rival.

Tácticamente su sistema funcionó mejor con la incorporación de Matuidi por Dembelé, hubo mayor presión y orden en mediocampo. Siempre en posesión del balón. Siempre detrás del balón donde defienden 9 y dejando a uno arriba. Con Griezmann, Mbappé y Pogba invitaba a un juego más directo y vertiginoso. Sin dejar de ser abejas obreras, eran la miel de la colmena.

Fue el mundial de la paz y el orden.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.