Lo de la UC se llama hegemonía

El insultante dominio del bicampéon desde que hace tres años tomó el mando del fútbol nacional.



Universidad Católica camina a paso firme en el fútbol chileno. Con un liderato sólido y que en realidad comenzó en 2018, justo cuando se volvió a la fórmula de torneos largos. La estadística es brutal. El conjunto de la franja acumula en los tres últimos torneos 142 unidades en 65 partidos, muy por encima de los demás. El que le sigue, la U, con 103, aparece a 39 puntos de distancia. A Colo Colo lo tiene a 50.

En ese tiempo, la UC jugó 65 encuentros, de los que ganó 42, empató 16 y solo perdió 7. En goles también arrasa: 109. El único capaz de rebasar la frontera de los 100 en este tiempo. La diferencia de goles es aplastante: +61. Mucho y por encima de los +22 de Antofagasta, el mejor perseguidor en este ítem.

Desde 2018, el torneo ha desarrollado 65 fechas (no se incluye la que comenzó el jueves), de las que Católica ha sido líder en 60 (48 como puntero exclusivo). Solo en cinco jornadas durante su hegemonía no estuvo en la cima de la tabla. Fue entre la segunda y la séptima de 2019. Con Beñat San José, con Gustavo Quinteros y con Ariel Holan el rumbo es el mismo: la UC gana y manda.

Para Ricardo Lunari, histórico ex jugador de la franja, el dominio cruzado se explica en la continuidad del proyecto: “El éxito de Católica se debe a un trabajo planificado muy despacio por la dirigencia. Hay que darle un mérito grande a lo hecho por Buljubasich, que de a poco fue llevando mejores refuerzos. Católica tiene un plantel muy superior al resto de los equipos y eso se demuestra partido a partido”.

Jorge Contreras, otro ex de la UC, destaca también la acertada elección de entrenadores. Y eso que han ido variando, siempre por voluntad de los DT, no del club: “Han trabajado muy bien con un proyecto determinado, un estudio detallado de sus contrataciones y en la búsqueda de los técnicos adecuados al modelo de juego que los identifica. A nivel internacional, en los últimos partidos han dejado una buena imagen. Si siguen trabajando y mejorando seguro podrán ser más competitivos en este ámbito”.

“Lo que Católica tiene que seguir intentando”, añade el Cadi Lunari, “es mejorar a nivel internacional. Está en un buen camino. Partidos como ante Gremio o en Cali, le darán ese prestigio que hace rato no tenía en el extranjero”.

Ambos coinciden al nombrar al jugador clave de esta hegemonía. “Sin duda el Chapa Fuenzalida, porque físicamente se le ve muy bien y, a estas alturas, demuestra una madurez futbolística determinante en su juego”, sentencia Contreras.

Y añade Lunari: “Dentro de un par de jugadores a gran nivel como Aued, Dituro, Puch y Saavedra, la figura de este presente es Fuenzalida. Chapita está en su mejor momento. Contagia desde cualquier posición en que lo ponga el entrenador: no solo de lateral, sino que también en el medio. Su vigor, su entrega, su vitalidad, a pesar de sus 35 años, y el rendimiento que está teniendo lo sindican como la figura de esta Católica”.

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