"Paso, gracias". Nicolás Peric, quizás, prefirió no entrar en el desafío. El juego de ver al verdugo con los ojos de la víctima. No es un tema fácil para los arqueros, especialmente para los que vivieron en carne propia cada uno de los 215 goles con los que Esteban Paredes alcanzó a Francisco Valdés como el máximo anotador de la historia de la Primera División chilena.

"Es raro describir a alguien del que todos saben sus virtudes", dice Lucas Giovini, nueve veces batido por Paredes. "Es un jugador letal, por las capacidades que tiene. Se mueve bien, sabe dónde estar... Tiene una enorme jerarquía", agrega el meta de Unión La Calera que, el 27 de abril de 2014, defendiendo a Ñublense, recibió cinco goles del artillero, su máxima cuota para un solo encuentro. "Ese fue un partido de locos, pero la verdad es que no manejaba la estadística. Su récord no es gratuito. No es un delantero más. Es un jugador legendario", acota.

"Enfrentarlo es de lo más difícil. Tiene jerarquía, categoría, creatividad", afirma, en tanto, Cristián Muñoz, actual meta de la Universidad de Concepción, 12 veces vencido por el atacante, el tercero al que más le anotó. "Fuimos compañeros en Colo Colo. Es un gran tipo, un enorme profesional. Es un jugador difícil de descifrar. Siempre inventa algo diferente. Para mí, tiene una frialdad única", añade el Tigre, quien reconoce que hará "fuerza para que siga marcando y quede en lo más alto". Sin rencores.

El "paso" del Loco Peric no fue gratuito. ¿Un trauma quizás? Es el meta más batido por Paredes, con 17 anotaciones. Johnny Herrera, el segundo del listado (16), también prefirió restarse del ejercicio. Eso sí, en una entrevista con La Tercera del 29 de julio, el azul reconoció que "Paredes pateaba los penales, las hacía todas, entonces era normal que me hiciera más goles que el resto de los delanteros. Es un gran jugador".

"Se lo ganó a pulso"

"Esteban es un enorme futbolista. Uno que muchas veces ha sido capaz de ganar partidos completamente solo", asegura Felipe Núñez, séptimo en el listado de batidos (6). "Estar entre los que más goles le hizo es anecdótico para mí. Su récord es importante, sí, y solo queda felicitarlo. Se lo ganó a pulso. No sé si habrá alguna vez alguien siquiera cerca de igualarlo", sentencia.

La huella de Paredes parece indeleble. Entre los hinchas, compañeros y rivales. Entre los que recibieron decenas de sus goles y entre los que recibieron apenas uno. "Con él siempre hay que tomar precauciones. Es imposible de predecir", opina José Luis Gamonal, a quien el colocolino le anotó su tanto número 200. "Se vive una tensión diferente cuando te encara. No es como el delantero promedio. Esteban va y no deja de ir", añade. "Pero ojo que aún le queda. Estoy seguro de que va a seguir anotando y dejando su nombre en lo más alto. Se lo merece", cierra.