El peor Barrios de Chile

Barrios

Los números de los últimos duelos no acompañan al goleador. En el cuerpo técnico confían en su jerarquía y esperan que se recupere ante la U.



Sin duda que Lucas Barrios fue el gran precio del segundo semestre en el fútbol chileno. El delantero argentino nacionalizado paraguayo volvía a Colo Colo después de nueve años, a cambio de US$ 1.350.000 por 18 meses.

Y tuvo un comienzo soñado frente a Unión La Calera. El goleador anotó uno de los dos tantos en la victoria 1-2 y en la fecha siguiente, contra Curicó Unido, repitió la dosis convirtiendo el 2-0 definitivo. Eso sí, a pesar de su conquista, en este último encuentro, los números de la Pantera fueron bajos. A saber, tuvo 47,6% de efectividad con sus pases en campo rival; perdió 14 de 23 duelos y ocho de 13 aéreos.

Luego de ser baja ante Temuco por un problema muscular, retornó ante Corinthians, por la Copa Libertadores, donde no pudo concretar las opciones que tuvo. Después, frente a San Luis se perdió goles en inmejorable posición y también perdió varios duelos ante la defensa canaria.

Sin embargo, fue en el partido ante Iquique, donde cumplió su actuación más pálida. El delantero ganó apenas cinco de los 18 duelos que tuvo frente a los jugadores rivales y perdió seis de los siete enfrentamientos aéreos. Además, tuvo ocasiones para desnivelar, pero falló.

En cuanto a los pases que recibió, su mayor abastecedor fue Jaime Valdés (15).

Asimismo, en los cuatro partidos que ha disputado por el Torneo Nacional ha rematado 11 veces, cinco de ellas al arco.

La valiosa información que entrega el sistema Opta también permite conocer cómo han sido los movimientos que ha realizado el mundialista guaraní. Así, por ejemplo, en su debut frente a los caleranos, Barrios se movió por todo el sector izquierdo del ataque desde la mitad de cancha hacia adelante y también con fuerte presencia en el centro del área.

En el duelo ante Curicó también se cargó hacia el sector izquierdo. Sin embargo, lo hizo desde más atrás de la mitad de cancha. Es decir, se tuvo que recoger más de la cuenta. A pesar de eso, también tuvo presencia en la entrada del área.

Contra San Luis, el atacante se mantuvo lejos del área. Nuevamente, cargado por el sector izquierdo, pero esta vez con menos presencia en el área quillotana que en los partidos anteriores.

No obstante, frente a los iquiqueños, donde el ariete actuó como único atacante, sus movimientos se concentraron principalmente en la mitad de la cancha, zona en la que intentó engancharse. Lejos del área, con poca efectividad y bien marcado, no pudo desequilibrar.

Conscientes de esto, en el cuerpo técnico creen en su jerarquía, amparados en que el equipo actúa mejor cuando la presión es mayor. Y el Superclásico aparece como la oportunidad perfecta para que el goleador reviva jornadas gloriosas. Colo Colo y Tapia lo necesitan con urgencia.

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