"Yo quería ser como el Milo": Cristián Álvarez entrevista a Ignacio Saavedra

ALVAREZ SAAVEDRA
Cristián Álvarez, durante la entrevista a su hasta hace unos días compañero Ignacio Saavedra. Foto: José Luis Muñoz

La temporada de la estrella 13ª de la UC fue a la vez la de la despedida del capitán (38) y la del alumbramiento de la revelación del campeonato (19). El Huaso, tras ejercer de ídolo, consejero y compañero, entrevista a la joya emergente que aspira a sucederle como referente cruzado.



¿Cómo evalúas tu primera temporada como profesional?

Fue una buena temporada. Entrenar con el plantel, jugar de titular varios partidos y salir campeón de verdad que es muy bueno. Ahora hay que seguir trabajando para lo que viene el próximo año, con torneo y Copa Libertadores.

¿Te imaginabas un 2018 así de redondo? No solo debutaste, si no que te afirmaste como titular.

Uno siempre tiene expectativas cuando comienza un nuevo año, con nuevos desafíos. En mi caso, como te decía, ya entrenar con el plantel y sumar minutos, debutar en San Carlos, fue un sueño que se coronó saliendo campeones.

¿Cuáles son tus expectativas para el próximo año?

Seguir consolidándome, jugando, agarrando experiencia. Siempre paso a paso.

¿Quieres consolidarte en Católica antes de partir al extranjero?

Lo he dicho otras veces, estoy feliz en Católica y uno tiene que ir cumpliendo etapas de a poco. Es mi primera temporada como profesional y salir campeón con la UC es un sueño cumplido. Solo tengo que disfrutar este momento y seguir trabajando.

¿Crees que la UC pelea el bicampeonato?

Somos Universidad Católica, siempre hay que pelear. Lindos desafíos para el próximo año.

¿Cuánto ayuda compartir, entrenar y jugar con tantos futbolistas salidos en casa?

Son jugadores que uno conoce desde chico, que te formaste con ellos. Es una sensación muy especial que ayuda mucho.

En mi época, cuando fuimos juveniles, teníamos un grupo con mi hermano Iván, el Milo Mirosevic y el Coto Ribera, ¿cuál es el tuyo y de qué hablan?

Tuve hartos grupos, pero el más consolidado era con Vicho Fernández, Seba Pérez y Lucio Paulizzi. Hablábamos de todo, tirábamos tallas, conversábamos de fútbol y también de estudios, porque íbamos juntos al colegio, y nos reíamos por todo.

¿Por qué crees que tú, César Munder o Diego Valencia tuvieron esta explosión y llegaron a ser aportes más allá de la regla del Sub 20?

Primero por la confianza que nos dio Beñat. También por la constancia y el trabajo. Uno en los entrenamientos tiene que dar lo mejor de uno, siempre ser pro equipo, siempre apoyar al compañero. Te da tranquilidad además, que los más grandes, como tú, siempre estuvieron ahí para darnos consejos, para guiarnos a los más chicos.

¿En quién del plantel profesional te reflejabas cuando aún estabas en las juveniles de la UC?

Cuando estaba más cerca del plantel, en las categorías inferiores, me reflejaba en Fabián Manzano y Carlos Lobos, porque eran los volantes de la cantera que estaban más cerca de mí. Y bueno, cuando chico me fijaba en Gary Medel, el Milo Mirosevic y tú, porque eran los ídolos de Católica y por todo lo que generaban en la UC.

¿Como qué jugador histórico querías ser cuando pequeño?

Como el Milo. Me impresionaban todos los goles que hacía, y jugando de volante. Desde afuera se veía un 7 como persona y bueno, cuando lo conocí, me di cuenta que era así. Lo único que tengo en contra de él es que me dejó encargado de los cumpleaños del equipo...

¿En qué te aportamos los más experimentados como Chapita Fuenzalida o yo?

Han sido importantes sus consejos, también todas las conversaciones que hemos tenido. El estar siempre ahí para apoyarnos en la cancha, en el camarín y en los entrenamientos.

Para mí, ser de Católica significa responsabilidad, significa que, más allá de ganar un partido, hay que ir creando valores y respeto hacia el fútbol. ¿Qué significa para tí?

Saber amar al club más allá de los títulos, porque la gente de la UC lo ama por su historia, por su cantera, por sus jugadores, por sus actos sociales.

¿Crees que pude haber seguido jugando?

Sí, creo que podías seguir y te lo dije.

¿Por qué?

Porque físicamente eras el mejor, porque tu porcentaje de grasa y masa muscular eran de los mejores del plantel, y porque todavía hacías cosas muy buenas en la cancha. Además, por el gran líder que eres.

Y ahora que me retiro del fútbol, ¿a qué crees que debería dedicarme?

A hacer stand up comedy. No, broma. Tienes que seguir ligado al club sí o sí, ojalá como entrenador, ya que sabes mucho de fútbol.

¿Qué pensabas de mí como capitán cuando solo me veías a lo lejos y aún no llegabas al primer equipo?

Que eras un tipo serio, pesado, como un jefe. Pero después me di cuenta de que eres una gran persona, identificado con la cantera, enseñándonos cosas del club. Y un gran líder.

¿Te tocó ser pasapelotas conmigo en cancha? Cuéntame de eso.

Sí, me tocó muchas veces. Cuando íbamos perdiendo me pedías las pelotas rápido para jugar, como lo hacen todos.

¿Qué partido mío es el que más recuerdas?

Recuerdo el partido contra Huachipato, por Copa Chile, en 2017. Perdimos (3-2), pero jugaste de stopper y diste un baile en ese partido. Terminaste haciendo un gol y fue increíble. Estaba en la banca y de verdad me dejó impresionado.

Como jugador de fútbol, tus principales virtudes son la visión de la cancha cuando juegas, cómo vas manejando los tiempos del partido, ¿cuáles crees que fueron las mías?

La pasión con la que jugabas, que eras muy inteligente, que defensivamente eras muy bueno en el uno contra uno. Y que hacías muchos goles a pesar de ser defensa.

Eres el tercer capitán de la Selección chilena Sub 20. Más que pregunta, esto es un consejo: sé siempre un ejemplo; en las buenas y en las malas, que te vean siempre bien.

Lo tomaré y no solo eso, también todo lo que me dejaste como capitán. Espero poder replicarlo.

Te dejo contar una anécdota conmigo, pero antes cuenta qué pasaba cuando te estabas duchando y llegaba yo.

Yo también la iba a contar, pero algo me dijo que lo harías tú. Pasa que yo me duchaba en una ducha cuando tú no estabas y esa ducha era tu favorita. Cuando llegabas siempre me cambiaba de ducha y te dejaba esa a tí y todos se reían.

¿Y otra que contarías tú?

Una vez nos pusimos a jugar que no caiga (que la pelota no toque el suelo). Llegaste tú, empezaste a pegar fuerte y después todos nos fuimos contra ti. No perdías nunca, hasta que lo hiciste y te llegaron muchas patadas fuertes... Después decías que no estabas para entrenar, del dolor, aunque todo en broma.

¿Quién gana en un uno contra uno? ¿Álvarez o Saavedra?

Depende de un mano a mano en qué, pero en fútbol, yo creo que tú, por la experiencia.

Bueno Nacho, ánimo con el proceso de recuperación de la operación. Ojalá que se dé todo rápido y que sigas por el mismo camino que estabas mostrando hasta lesionarte, que sigas siendo importante en la Católica y en la Selección Sub 20.

Gracias Huaso. Me esforzaré por volver pronto y fuerte.

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