Cómo la pandemia cambió la guerra matinal

Solo una décima de rating separan a Bienvenidos de Mega en abril.

En estos dos meses, la lucha por el rating se ha estrechado, con CHV a la cabeza. Un escenario marcado por la similitud de contenidos y la alta presencia de alcaldes.


La conclusión es unánime: para los matinales han transcurrido los meses más difíciles, desafiantes e intensos de los últimos años. Primero a partir del estallido social y ahora producto de la pandemia por el coronavirus.

“Yo no haría ningún corte: creo que de octubre hasta acá cambió la pauta, cambiaron las prioridades, la agenda y los contenidos de los matinales”, concluye Julio César Rodríguez, conductor de Contigo en la mañana, de CHV.

Pero si el estallido social fue un primer remezón al formato, poniendo el foco en lo informativo -e incluyendo salidas y llegadas de animadores y panelistas-, la emergencia sanitaria ha producido otro cambio: homogeneizar aún más la oferta. Un ejemplo: alcaldes como Joaquín Lavín (Las Condes) o Evelyn Matthei (Providencia), ministros como Karla Rubilar o Sebastián Sichel, y médicos como Sebastián Ugarte o Felipe Rivera, están entre los que se repiten el plato en los paneles.

Para algunos de quienes trabajan en la industria, esta sería la causa de que en las últimas semanas exista una reñida disputa por el liderazgo matinal, que se libra técnicamente día a día, con CHV, Mega y Canal 13, peleando ese primer lugar que por años ostentó Mega con comodidad.

En los dos meses de pandemia, las cifras de los matinales se han elevado -por el aumento del encendido-, además de acercarse progresivamente. Así ha quedado en una leve ventaja Contigo en la mañana, que en su horario registró 7,0 puntos promedio en marzo y 7,6 en abril -medido del 1 al 29 del mes-.

Mucho gusto, en tanto, promedió 6,5 puntos de rating en marzo y 7,3 en abril; mientras que Bienvenidos anotó 6,5 unidades en su horario durante marzo y 7,2 en abril -calculado del 1 al 28-.

“La verdad que el mérito de las cifras no tiene mucho que ver con cada uno de nosotros en los matinales”, opina Pablo Alvarado, productor ejecutivo de Mucho gusto, “sino con la participación o no de lo que son los actores más atractivos para las audiencias en estos días, que son los alcaldes y algunos médicos. Entonces, si revisas la performance de los matinales, en el fondo lo que va marcando el éxito o el fracaso en términos de números está dado por el que tuvo al alcalde más top o más masivo”.

“Estamos bastante parejos todos”, comenta Monserrat Álvarez, conductora de Contigo en la mañana. En su caso, rescata que la contingencia “nos pilló bien parados en el sentido que estábamos haciendo un matinal que tenía que ver con eso, con lo informativo, y no con lo que uno entiende tradicionalmente, con entretención, concursos y bailes”. La productora ejecutiva del espacio, Carmen Gloria Lobos, añade otro punto a favor: la dupla de conductores, que lleva un año en ese rol y es la única de los matinales que se mantuvo invariable tras el estallido social. “Son sumamente asertivos: cuando hay que reírse son los primeros; pero si hay que emplazar a algún entrevistado se va a hacer porque no somos relacionadores públicos”, dice.

Mucho gusto ha experimentado cambios en los últimos meses, tanto en su propuesta como en el panel. A inicios de marzo debutó un bloque informativo a cargo de Diana Bolocco, Soledad Onetto y Michelle Adam, separado de los animadores Luis Jara y José Miguel Viñuela. Pero la situación actual ha variado esa estructura, adoptando un sistema de turnos. “El escenario del programa también ha ido cambiando, se ha tenido que ir adaptando a lo que quiere la gente”, comenta Viñuela, “y gracia Dios la respuesta de los televidentes ha sido bien beneficiosa para el canal”. Justamente las cifras siguen acompañando al programa, pero no con la supremacía de antes. “Efectivamente las cifras se han estrechado porque estamos todos haciendo lo mismo. El éxito del Mucho gusto durante 6 años ha sido diferenciarse. Mientras un porcentaje alto de la competencia está en temas policiales, nosotros siempre hemos estado más desde acompañar a la gente, hacerlos pasar una buena mañana o desde la conexión con lo social”, analiza Alvarado.

Bienvenidos, en tanto, se enfrentó a la emergencia sanitaria con un recién llegado Amaro Gómez-Pablos en la conducción junto a Tonka Tomicic, marcando las nuevas intenciones del canal con su matinal. José Miranda, director de programación, comenta que Bienvenidos “desde el año pasado a la fecha ha centrado sus contenidos en temas de contingencia, en lo que afecta e importa a la sociedad chilena, y desde ese lugar se ha tornado un matinal relevante, influyente”.

“Creo que los canales se pueden ver como un cuerpo”, complementa Gómez-Pablos, “y la columna vertebral son los matinales. Y ha estado reñido porque efectivamente muchos chilenos tienen que sintonizar con distintos programas en la búsqueda de las respuestas”.

En TVN, Buenos días a todos, aunque mantiene el cuarto lugar, también ha elevado sus cifras respecto a los meses previos a la pandemia, acercándose al resto de la competencia: en marzo promedió 5.1 puntos y 5.3 en abril. “Hay más gente viendo matinales por las cuarentenas”, dice la animadora María Luisa Godoy, “las audiencias están más necesitadas que nunca de información y también de compañía y cariño, y cada matinal en su estilo puede ser un aporte en eso”. Todo esto, no obstante, transcurre en medio de una nueva reestructuración en el canal público, luego que la crisis sanitaria agudizara los problemas financieros que arrastran hace seis años. Esto ha involucrado reducciones de sueldo a sus rostros y despidos que han afectado a todo TVN, incluido el equipo matinal.

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