El tercer álbum del músico sanmiguelino, editado en septiembre de 2010, resultó un momento decisivo. No solo porque abrazó de forma definitiva la canción pop, sino que en el proceso afianzó ciertas decisiones y métodos que resonaron en sus trabajos siguientes. De la historia tras la fantasía andina de “Alfabeto”, al pop de “Lienza”, el músico detalla a Culto la trastienda de un álbum que define como “punto de inflexión” en su carrera.
16 sep 2020 08:04 AM