Ministros del comité político y asesores del Segundo Piso durante los últimos días han mantenido contacto con los extitulares del Interior Andrés Chadwick y Gonzalo Blumel, quienes tienen una relación cercana con el Presidente Sebastián Piñera.

Ambos salieron del gabinete en momentos de crisis, pero siguen en contacto permanente con el Jefe de Estado, lo que se ha intensificado tras la crisis política que derivó de la decisión de La Moneda de acudir al Tribunal Constitucional (TC) para frenar el tercer retiro previsional. Una determinación que agudizó la confrontación entre el gobierno y Chile Vamos ante el temor de los efectos que puede tener en los resultados de las elecciones del 15 y 16 de mayo. A eso se suma el factor del descontento ciudadano, las críticas en la oposición y una incipiente acusación constitucional en contra de Piñera.

En este escenario, La Moneda contactó a los exministros para que contribuyan a convencer al Mandatario de avanzar hacia un acuerdo político e ir mejorando las medidas para hacer frente a la pandemia del Covid-19.

Tanto Chadwick como Blumel, de acuerdo a las mismas fuentes, han conversado con Piñera al respecto en los últimos días, haciendo hincapié en la necesidad de avanzar a un entendimiento por dos principales razones. Primero, por el riesgo de una crisis institucional más profunda y, segundo, por el costo electoral que puede significar para la coalición el no tener una alternativa contundente que ofrecer a la ciudadanía en caso de que el fallo del TC, tal como espera La Moneda, sea favorable para el gobierno. Hoy en el oficialismo varios creen que Chile Vamos corre el riesgo de no conseguir el tercio en la elección de constituyentes.

Por su parte, Blumel trabajó en la propuesta de Evópoli (partido en el cual milita) de crear un “ingreso solidario de emergencia”, y ha mantenido conversaciones con el abanderado presidencial de su partido, el exministro de Hacienda, Ignacio Briones, que también le ha planteado el tema al Jefe de Estado. El exministro del Interior, según cuentan en la UDI, también se ha acercado a tratar el tema con el senador Claudio Alvarado, con quien tiene una estrecha relación desde que ambos formaban parte de la Segpres en los inicios de esta administración.

Tanto Chadwick como Blumel asumen un rol como facilitadores del diálogo en medio de la crisis, en un contexto en que el comité político de Piñera se ha visto bajo presión, cuestionado desde el propio oficialismo por no responder a las demandas de Chile Vamos.

Primeros pasos del acuerdo

En este contexto, el gobierno ha iniciado los primeros pasos para conseguir un acuerdo que aplaque la crisis tras el tercer retiro. Lo primero han sido las conversaciones al interior del oficialismo, en el cual Piñera decidió tener un rol protagónico, contactando a los presidenciables del sector y principales dirigentes.

Lo que busca La Moneda no es sólo una reforma tributaria que recaude recursos fiscales para financiar medidas para enfrentar eventuales nuevas olas de la pandemia. También quieren responder a demandas de ayuda inmediatas. Por lo mismo, dentro de las conversaciones se exploran la idea de habilitar retiro de fondos en el marco de la reforma de pensiones, la extensión del bono clase media y las transferencias directas o “rentas solidarias”.

Para Palacio, la meta es lograr un entendimiento de aquí al domingo y ahí se afirma que el primer paso concreto fue la reunión que ayer sostuvo Piñera con los dirigentes de los partidos Chile Vamos. En esta les pidió apoyo para sacar adelante un acuerdo.

Ahora, agregan las mismas fuentes, se pretende potenciar los acercamientos con la oposición. Así, los ministros Juan José Ossa (Segpres), Rodrigo Cerda (Hacienda) y Karla Rubilar (Desarrollo Social) han contactado a personeros de la oposición para tantear la posibilidad de pactar un trato, en tratativas que aún se califican de incipientes e “informales”.

La suspicacia opositora

“No hay nada concreto”, decía esta mañana en entrevista con 24Horas el senador y miembro de la Comisión de Hacienda, Ricardo Lagos Weber (PPD). Y eso es lo que varios de sus pares de la centroizquierda repiten cuando se consulta por los avances en las negociaciones con el gobierno.

Hasta ahora, en el sector aseguran que las conversaciones no han tenido una propuesta sobre la mesa. Sin embargo, quienes han conversado con los ministros Cerda, Rubilar y Ossa, sostienen que han buscado sondear la disposición del sector para alcanzar un acuerdo y que el gobierno ha transmitido apertura para avanzar en una de las principales peticiones que ha hecho la oposición desde el inicio de la pandemia: una renta básica solidaria.

Si bien se les ha transmitido que no se restarán de espacios que puedan dar soluciones a la crisis que vive el país, en privado, reconocen que hay muchos factores complicando que un trato de esta envergadura flote.

Así lo resume un senador que ha estado en diálogos con el Ejecutivo, pero que prefiere hablar fuera de micrófono: “Hay varios frentes abiertos; el electoral, la pandemia, la intención del gobierno de incluir en esto la reforma previsional... No veo, en ningún caso, la posibilidad de un acuerdo en el corto plazo. Empiezan a hablar de una renta solidaria, que sea más universal, sin filtro. Pero no sé si eso da para un acuerdo de manitos alzadas antes de la elección”.

Otro elemento es que en la centroizquierda advierten como una “debilidad” del gobierno la falta de interlocutores claros y “empoderados” para iniciar una negociación. “Este no es sólo un problema de diálogo sobre la cosa tributaria o el IFE. El problema es qué va a pasar en estos meses que le quedan. El Gobierno está haciendo daño y tiene la embarrada por todos lados. El equipo político es débil y de poco peso ante las complejidades que se viven y la actitud soberbia del Presidente. Cerda no tiene espacio ni oxígeno para desenvolverse”, afirma el senador de la Comisión de Hacienda, Carlos Montes (PS).

Desde el sector, en todo caso, aseguran que el gran nudo sigue siendo el requerimiento que el gobierno presentó ante el TC por el tercer retiro de fondos previsionales. La propia presidenta del Senado, Yasna Provoste, emplazó ayer al Presidente Piñera a retirarlo previo a iniciar una conversación en materia tributaria, que incluya impuesto a los altos patrimonios. Una petición que también realizó ayer la directiva de Renovación Nacional.

“He reiterado que el Presidente desista de este requerimiento ante el TC y hemos manifestado toda nuestra disposición para una reforma tributaria que permita garantizar mayores recursos para el Estado y tener una renta básica universal y poder establecer un espacio de trabajo, pero quiero también señalar con mucha claridad que todas estas conversaciones serán conversaciones transparentes y de cara al país”, sostuvo hoy la presidenta del Senado.