Billie Eilish: la noche consagratoria de la primera popstar del milenio

62nd Grammy Awards – Photo Room – Los Angeles, California, U.S., January 26, 2020 - Billie Eilish poses backstage with her awards
Billie Eilish con sus trofeos en la entrega de los Grammy 2020. Foto: REUTERS/Monica Almeida.

Anoche, en la gala de los Grammy, la cantante de 18 años pulverizó varios récords y se llevó los mayores premios del evento, como Disco y Grabación del Año por su álbum debut. Fue el triunfo definitivo de la primera megaestrella nacida post 2000 y de un trabajo grabado en su pieza que combina letras sobre depresión y tendencias suicidas, conciencia medioambiental y un look "anti-cosificación". La misma propuesta que trae a Chile en junio.


No solo se llevó los cuatro premios más importantes que entrega la Academia de la Grabación estadounidense. Anoche Billie Eilish selló un año glorioso en los premios Grammy, consagrándose como la primera estrella musical de la generación Z, la de aquellos nacidos entre fines de los 90 y la primera década del 2000.

Antes, solo con sus nominaciones a estos galardones, la cantante estadounidense se convirtió en la artista más joven en ser nominada a las principales categorías, con solo 17 años. Y ayer, en la versión 62 de los Grammy y ya con 18 años cumplidos -en diciembre pasado-, la artista californiana se llevó los gramófonos a Álbum del año por su disco debut When We All Fall Asleep, Where Do We Go? (2019), Canción del año y Grabación del año por el hit Bad Guy, más otros reconocimientos como Mejor álbum pop vocal y Mejor artista nuevo.

Con ello, la solista se transformó en la cantante más joven en ganar los cuatro premios clave de los Grammy en una misma edición. Pero además, es la primera que arrasa en las cuatro categorías principales después de 39 años de historia de estos galardones, tras la hazaña de Christopher Cross en 1981.

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Incluso, se podría contabilizar un gramófono más por el premio que obtuvo su hermano y productor, Finneas O'Connell, reconocido Mejor productor por su trabajo en el disco de su hermana. El mismo álbum que grabaron en la pieza de la casa materna en Highland Park, Los Angeles, donde ambos todavía viven.

"Hacemos música juntos en nuestro dormitorio y seguimos haciéndolo. Esto es para todos los jóvenes que hacen música en su dormitorio. Van a ganar uno de estos", comentó Finneas anoche sobre el escenario.

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Finneas O'Connell y Billie Eilish en los Grammy 2020. Foto: Jordan Strauss/Invision/AP.[/caption]

La cantante no solo triunfó en la premiación: su paso por la alfombra roja también la convirtió en ganadora, tomando distancia una vez más de sus colegas del género, siempre en competencia por ser "la mejor vestida" con trajes vaporosos, vestidos ajustados, o una que otra que rompe patrones con un esmoquin. Eilish pasó por la red carpet con un traje negro brillante Gucci, compuesto por pantalón, blusa y chaqueta oversize, unas largas uñas verdes, más una malla negra a modo de pañoleta que cubría su boca. Ya lo explicó antes, cuando participó en una campaña de la marca Calvin Klein: "No quiero que la gente lo sepa todo de mí. Por eso llevo ropa grande. Nadie puede opinar porque no saben lo que hay debajo".

Desde que lanzó el sencillo Ocean Eyes en 2015 a través de SounCloud -ya demostrando su lejanía con las estrategias tradicionales- solo semanas antes de cumplir 14 años, Billie Eilish se transformó en un fenómeno más allá de lo estrictamente musical, con una apuesta que se extendía desde sus letras muchas veces crudas y sin filtro, hasta sus atuendos holgados que dan la espalda a cualquier división de género.

Su EP Don't Smile at Me (2017) la llevó a los primeros puestos de los rankings en Norteamérica, Inglaterra y Australia, mientras que con When We All Fall Asleep, Where Do We Go? (2019) comenzó a cosechar los primeros récords: fue el álbum más destacado del 2019 en el ranking Billboard, y puede jactarse de ser la primera artista nacida en este milenio en lograr un álbum y un sencillo (Bad Guy) número uno en ese mismo chart.

https://www.youtube.com/watch?v=DyDfgMOUjCI

Con esto demostró que no solo pudo conquistar al público juvenil al que representa, con letras que reflejan inquietudes tan personales como universales para su generación, y que pasan de la crisis medioambiental hasta la depresión.

En este último punto se ha preocupado de hacer visible sus propios problemas de salud mental, lo que para ella es una forma de ayudar a quienes la siguen y pasan por lo mismo. "(A mis seguidores) les digo: 'Por favor, cuídate y sé bueno contigo mismo, sé amable contigo mismo. No des ese paso extra y te lastimes más'", comentó recientemente en un programa de la cadena CBS. Allí, por ejemplo, profundizó en lo difícil que fue asumir la fama. "Estaba tan infeliz, no pensé que llegaría a los 17", dijo, revelando que pensó terminar con su vida: algo que por ejemplo se plasma en el tema Bury a Friend, donde dice "quiero terminar conmigo". ¿Qué la llevó a seguir adelante? "Mi madre", confesó la cantante, muy apegada a su progenitora, Maggie Baird, quien incluso la acompañaba en esa entrevista.

También se ha transformado en una verdadera activista de las causas medioambientales y animalistas, por ejemplo, practicando el veganismo hace algunos años. Para su gira, además, se asoció con la organización sin fines de lucro REVERB, y así promover una cultura consciente sobre el medioambiente en cada una de sus paradas, que incluyen un desembarco en Chile para el 5 de junio en Movistar Arena -y cuyas entradas están agotadas-. Sus fanáticos podrán llevar botellas reutilizables para rellenarlas con agua dentro del recinto y se prohibirá el uso de bombillas plásticas. Además, se instalará un sector llamado Billie Eilish Eco-Village, donde los asistentes podrán encontrar información para ayudar a combatir el cambio climático.

Lo que viene

Con todos estos reconocimientos a cuestas, la artista se prepara para lo que viene. En los próximos meses su voz aparecerá en la próxima James Bond, titulada Sin Tiempo para Morir (9 de abril en cines). Esto ya que junto a su hermano fueron convocados para crear el tema principal de esta entrega, misión que previamente tuvieron intérpretes como Sam Smith y Adele. "Componer la canción principal de una película de Bond es algo con lo que hemos soñado hacer durante toda nuestra vida. No hay nada más icónico que unir música y cine como en Goldfinger y Live and Let Die", dijo la cantante cuando se reveló la noticia hace algunos días.

Además, su ascenso al estrellato quedará plasmado en un documental en manos de Apple TV +, a través de un acuerdo por US$ 24.7 millones anunciado recientemente.

Y en lo musical, ya prepara lo que será su segundo disco, esta vez desarrollado en un estudio de grabación. "Solía sentirse diferente realmente, pero creo que ahora es bastante parecido en general", comentó anoche a revista Billboard. "Realmente se siente genuino y natural cuando trabajamos juntos. Creo que por un tiempo fue como solo poder hacer música en nuestra casa, en la habitación en la que crecimos, y ahora siento que estamos en este lugar donde es como si pudiéramos hacerlo en cualquier lugar ... Se siente bien y estoy lista para salir de gira y hacer un álbum. Estoy lista y emocionada".

Pero más allá de lo musical, su mayor meta para este año está en un crecimiento personal. "Me di cuenta hace un par de meses que estoy en un período de mi vida que creo voy a extrañar", explicó al mismo medio. "La vida es un poco perfecta para mí en este momento para ser honesta, y siento que puedo decir eso ahora porque no lo fue por mucho tiempo", concluyó.

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