El perro robot que busca evitar la propagación del Covid-19 en Singapur

Un perro, negro y amarillo, se pasea en sus cuatro patas por un parque en Singapur. La única singularidad es que no es un perro real, sino que es un robot llamado Spot. Este proyecto del gobierno tiene como tarea recordarle a las personas con mensajes pregrabados las medidas de un distanciamiento social seguro para evitar la propagación del coronavirus.

Singapur tiene actualmente 21.707 casos y solo 20 fallecidos, un panorama que podría considerarse controlado si se tiene en cuenta su cercanía con China como territorio del sudeste asiático. De hecho, el gobierno de Singapur fue elogiado por sus rápidas y efectivas medidas como el cierre de fronteras y la creación de un sistema de rastreo para quienes habían estado en contacto con algún infectado. Sin embargo, a fines de abril se dio un alarmante y sorpresivo salto en los casos de 1.000 a 10.000 debido a un brote entre trabajadores migrantes con sueldos bajos que viven hacinados y que el gobierno había pasado por alto.

Con la intención de no dormirse en los laureles en la lucha contra el virus, es que este país comenzó a probar desde hoy este experimento de la empresa Boston Dynamics para mejorar la aplicación de medidas de control. Así, este perro robot ayudará con los esfuerzos de distanciamiento en parques, jardines y reservas naturales y está equipado con cámaras para ayudarlo a estimar el número de visitantes en los parques. Eso sí, las cámaras no podrán rastrear ni reconocer a individuos específicos, ni recopilarán datos personales.

El proyecto piloto está programado para ejecutarse como una prueba limitada durante dos semanas en el parque Bishan-Ang Mo Kio durante las horas de menor actividad. Pero si todo va bien, las autoridades considerarán expandir el programa hacia varios otros parques.

Spot, al ser un robot de cuatro patas, puede sortear obstáculos de manera más efectiva en comparación con los robots con ruedas, lo que lo hace adecuado para diferentes terrenos. Está equipado con sensores de seguridad para detectar objetos y personas a una distancia de un metro para evitar colisiones.

Como se controla de forma remota, el funcionamiento de este robot no necesita el acompañamiento de patrullas, lo que ayuda a reducir el riesgo de exposición al virus Covid-19. Pero por ahora, al menos un guardaparque patrullará el área junto con el robot.

Según el gobierno, Spot también está siendo utilizado en una instalación que alberga a personas con síntomas leves donde el robot ayuda a llevar medicamentos a los pacientes.

No se trata de la primera vez que el gobierno de Singapur adopta la tecnología en su respuesta al virus. En marzo, lanzó una aplicación de rastreo en todo el país que usa Bluetooth para ayudar a los usuarios a descubrir si tenían contacto cercano con alguien que estaba infectado.