Habla la pianista María Paz Santibáñez: "No soy representante de Palma Salamanca"

La pianista chilena dijo que no es la representante de Ricardo Palma Salamanca. "Soy solo una más de los miles que ha apoyado la causa que su defensa expuso", escribió en Facebook.


La reunión del pasado 3 de septiembre entre el ex frentista Ricardo Palma Salamanca y los diputados Gabriel Boric (MA) y Maite Orisini (RD) en París, se realizó en la casa de María Paz Santibáñez. Una pianista chilena, baleada en una protesta en 1987, que fue agregada cultural en Francia en el segundo gobierno de Michelle Bachelet y que ahora reside en Europa.

De hecho, como lo reconoció Boric, ella fue la que hizo las gestiones para que los parlamentarios se reunieran con el ex subversivo. "A través de la representante de la familia Palma-Brzovic, María Paz Santibáñez (pianista chilena baleada en la cabeza durante una protesta en 1987, durante la dictadura militar), surgió la posibilidad de, en el intertanto de una escala en París en el regreso de un viaje oficial a Palestina, poder reunirse con Ricardo Palma para escuchar su historia", señaló Boric a Reportajes de La Tercera.

Ayer, a través de su perfil de Facebook, Santibáñez escribió una declaración donde dice no ser la representante del "Negro". "En relación a Ricardo Palma Salamanca, asilado en Francia luego de una acuciosa investigación: No soy ni he sido representante de Ricardo Palma Salamanca, soy solo una más de los miles que ha apoyado la causa que su defensa expuso", se lee.

En la red social, además, le bajó el perfil a su nexo con el ex frentista. "No avalo ni avalaré cortinas de humo (con exceso de prensa) como las alharacas y destempladas denuncias contra quienes han encontrado, gracias a mi supuesta intervención, a un hombre libre en Francia -Ricardo- en tiempos en que él estaba regularizando su situación sin esconder nada a las autoridades", agregó.

"Reafirmo lo que siempre he dicho: Sin memoria no hay futuro, y creo y espero que Chile algún día recobrará ese país con alma que sus millones de habitantes solidarios, sensibles y esperanzados desean reconstruir. No está de más señalar que considero que las últimas semanas, enfocadas en las aristas de este caso, tal vez han comenzado a hacer ceder las bases mismas del negacionismo que tanto han añorado instalar amplios sectores del país, no así su gente. Se abre el tiempo de la gente. Esto lo agradezco", cierra.

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