“No desde mínimos comunes”: Rincón da a conocer su programa presidencial previo a Provoste

“Sí, amigas y amigos, por el respeto que le debo a cada mujer, a cada hombre, a cada joven que trabajó y aportó con su mirada para construir un programa transformador, para revolucionar Chile no desde mínimos comunes, sino que buscando los máximos necesarios que permitan tener dignidad a cada uno de los chilenos y chilenas de nuestro territorio. Así nace este libro”.

Ese es uno de los párrafos contenidos en una carta que escribió la excandidata presidencial de la Democracia Cristiana, Ximena Rincón, en la que explica su decisión de dar a conocer su programa presidencial, en medio de la primera semana de instalación de la candidatura de su correligionaria y quien vino a reemplazarla en la carrera a La Moneda, Yasna Provoste.

En el texto la exabanderada -quien depuso su opción en medio de la caótica jornada de inscripción de primarias presidenciales de 19 de mayo, en las que la centroizquierda no logró suscribir un pacto- hace referencia al hito político que logró catapultar la candidatura de la presidenta del Senado, quien inició un proceso denominado “mínimos comunes” con el fin de lograr acuerdos en materias de ayudas sociales entre la oposición y el gobierno. Tras ese episodio y las elecciones de convencionales constituyentes, en la DC se instaló una fuerte tensión entre ambas parlamentarias, la que terminó en que el partido abandonara la opción de Rincón.

“Circunstancias por todos conocidas impidieron que la voluntad de la ciudadanía fuera respetada. Pero no estoy aquí hoy para volver ese tema, sino porque creo que es fundamental retribuir el esfuerzo de muchos que entregaron su tiempo, conocimiento, dedicación y esfuerzo a escribir una propuesta programática”, sostiene la senadora Rincón en su misiva.

Y agrega: “Este es el fin de una etapa, pero el comienzo de un proceso irreversible: Chile cambió ya nada puede hacerse sin la ciudadanía, ni menos dejar de lado aportes valiosos como estos. Espero que otros hombres y mujeres den esa batalla y podamos transitar por el siglo XXI como un país desarrollado”.

Por su parte, Provoste aún no lanza su programa e inició un proceso participativo a través del Ayllú (comunidad social en lengua quechua) ciudadano que lidera el exministro de Medio Ambiente, Marcelo Mena y la exsubscretaria de Hacienda, Macarena Lobos. Si bien desde ese comando ya han ido entregando algunas ideas programáticas, esperaban lanzar un conjunto en unas semanas.

En el programa de la parlamentaria por el Maule -que tenía de eslogan “revolución de la dignidad”- se abordan temas como cultura, seguridad, salud y política internacional, entre otros. Por ejemplo, reforzar la atención primarias en el sistema de salud y fortalecer la ley Ricarte Soto y la ley Nacional del Cáncer.

Rincón establece en su programa que “el derecho a la salud debe ser consagrado en la Constitución y tutelado adecuadamente, a través del establecimiento de un sistema de salud universal, y la obligación del Estado de garantizar el acceso libre e igualitario a servicios de salud integrales e inclusivos, oportunos, de calidad y acordes a las necesidades de la población, considerando su pertinencia cultural, de género y territorial”.

Plantea también que “la Constitución debe garantizar la protección financiera por el uso de dichos servicios. Se propone el derecho a la salud pensando en todos y todas, garantizando un acceso universal en el que efectivamente exista disponibilidad por parte del Estado para cubrir los requerimientos de las personas enfermas”.

Subraya también la propuesta de “Establecer un Plan Nacional de Salud Universal, el que contemplará como mínimo lo que hoy ya constituye garantías explícitas en salud y los aranceles de FONASA en modalidad Institucional y libre elección y GES. El Plan será el instrumento de la seguridad social en salud, constitutivo de derechos, de igual contenido, universal y debidamente financiado”.

En tanto, en materia internacional, en el texto se proponía firmar el acuerdo de Escazú, el Pacto Mundial de Migraciones, así como intensificar las relaciones entre Chile, la Unión Europea y la región de Asia Pacífico.

Por su parte, la exabanderada planteaba la creación de una “red nacional descentralizada de prevención del delito”, en la que se entregaran más recursos a los consejos comunales de seguridad pública, se generara una “defensoría ciudadana contra la delincuencia y la violencia” y se ampliaran los centros de protección de la mujer, entre otras cosas.

En materia de recursos hídricos, la exabanderada se sumó a las peticiones de establecer el agua como un “bien nacional de uso público”. Sin embargo, en su programa también se plantea la búsqueda de criterios y condiciones para “hacer uso privativo del agua”. En ese punto, la parlamentaria planteaba que la ley debe regular la forma en que particulares podrán hacer uso del agua, siempre orientados “al interés general y ambiental”.