Venezolanos sin luz: "Es como vivir un calvario"

A cuatro días del apagón que dejó a casi todo el país a oscuras, el servicio eléctrico opera con intermitencia en ocho estados y otros 16 continuaban sin suministro en la madrugada.


"Todo está paralizado. En mi zona hemos tenido más de 10 cortes de luz y he tenido que improvisar con inversores de voltaje y luces LED. En las pocas horas que llega la energía aprovecho para hacer hielo, purificar agua y llenar tanques", relató a La Tercera PM Juan Becerra, de 53 años, un hombre que desde 2002 trabaja como electricista en Caracas, en el sector de Colina de los Caobos. "Uno de los problemas más graves, es que vamos a entrar en un colapso por falta de agua en la capital, porque las bombas que trabajan para el acueducto llevan una semana sin funcionar. Es como vivir un calvario", agregó en una conversación por WhatsApp.

Con las calles vacías, el comercio cerrado y sin clases ni actividades laborales, Venezuela da inicio a una nueva jornada sin luz. El jueves, un apagón histórico producto de una falla en la represa Guri de Bolívar –la segunda central hidroeléctrica más grande de Sudamérica y la principal de ese país- dejó sin energía al 90% de la nación petrolera. Sin embargo, a cuatro días del gran corte, el servicio eléctrico opera con intermitencia en ocho estados y otros 16 continuaban a oscuras en la madrugada.

Río Blanco II, un barrio del municipio de Girardot en el estado de Aragua, ha sido una de las localidades más afectadas por el corte. Así lo narra a La Tercera PM Jubelys Álvarez, estudiante venezolana de Derecho de 23 años. "Algunos sus vecinos sacan sus colchones al patio y duermen ahí. Pero nosotras no podíamos quedarnos hasta tarde afuera, la inseguridad en medio de la oscuridad es peor (…) durante el fin de semana pudimos disfrutar de tan solo de ocho horas de electricidad", señala Álvarez, quien además detalla que algunas noches su madre y su hermana junto a su sobrino de dos años durmieron en la entrada de la casa, entre hamacas y colchonetas. "Río Blanco amanece sin luz otra vez, queda poca agua y por eso fuimos al barrio vecino en camioneta a llenar todo lo que pudimos", agregó.

Otros como Carlos Benucci (23), de la urbanización Sebucán de Caracas, acusan "desesperanza" producto de la crisis. "En mi casa veo a mi papá, un científico profesional, tratando de buscar información por todos lados y saber qué está pasando. Mi mamá también hace lo mismo. Todos se preguntan cuánto tiempo vamos a aguantar este apagón. He escuchado y visto cómo la gente se altera y se grita porque están todos desesperados, ya que los daños son emocionales y psicológicos", señaló.

Mientras el oficialismo insiste en que la falla en la central de Guri se debe a un sabotaje informático dirigido desde la Casa Blanca -denuncia que han prometido llevar ante la ONU-, el líder opositor y Presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, presentó esta mañana una solicitud ante la Asamblea Nacional para que se decrete estado de alarma en todo el territorio nacional. A las 12:00 hora local (13:00 de Chile) estaba estipulado el inicio de la sesión de emergencia en el Parlamento para tratar la emergencia.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.