En junio te contábamos cómo algunos fabricantes habían tenido que detener producciones por la escasez de semiconductores que afecta a la industria, o bien innovar (¿o ‘desinnovar’?), recurriendo a formatos análogos y menos electrónicos en sus vehículos, con el fin de evitar precisamente el cierre temporal de complejos (es el caso de General Motors y Stellantis). Ahora aquella estela se cierne sobre el grupo británico Jaguar Land Rover, que debió parar las producciones del Defender y del Discovery.

Según detalla el medio inglés Autocar, en abril JLR ya había parado en Castle Bromwich y Halewood, Reino Unido, poniéndole una pausa a la fabricación de los modelos Jaguar XE, Jaguar XF, Jaguar F-Type y los Land Rover Discovery Sport y Range Rover Evoque. Hasta ese minuto, Nitra (Eslovaquia) y Solihull (R.U.) seguían operando. La planta de Eslovaquia es precisamente la encargada de fabricar el Discovery y el flamante Defender (la versión cinco puertas debutó en octubre en Chile y en mayo se agregó la de tres puertas).

“Como otros fabricantes, estamos experimentando disrupciones en la cadena de suministros, incluyendo la disponibilidad de semiconductores, lo que está traduciéndose en un impacto en nuestro calendario. Como resultado, estamos ajustando la producción en nuestros complejos”, dijo un portavoz al citado medio. “Continuamos viendo una fuerte demanda por nuestros vehículos y estamos trabajando de forma cercana con nuestros suministradores para resolver los problemas y minimizar el impacto en las órdenes”, agregó.

Hasta ahora no hay una fecha estimada de reinicio de operaciones en Eslovaquia, donde se producen anualmente 150 mil vehículos, más de 1/5 de la producción total de JLR. Antes de la clausura temporal, los tiempos de entrega del Land Rover Defender en Europa ya estaban demorados.