Expertos de la ONU condenaron este viernes las ejecuciones de los tres hombres que participaron el pasado septiembre en las manifestaciones en Irán y han instado al Gobierno a detener la “horrible ola” de ejecuciones en el país.

“Estamos alarmados por los informes de procedimientos injustos en el caso y profundamente preocupados porque, según los informes, estos hombres han sido sometidos a tortura u otras formas de malos tratos para obtener confesiones forzadas”, han dicho los expertos en un comunicado emitido por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

“La ejecución de los tres hombres esta mañana subraya nuestra preocupación de que las autoridades iraníes sigan teniendo poco respeto por el Derecho Internacional”, explicaron, a lo que han añadido que “la pena de muerte se ha aplicado tras procedimientos judiciales que no cumplieron con las normas internacionales aceptables de juicio justo o garantías procesales”.

Según los informes, los tres hombres fueron detenidos el 21 de noviembre de 2022 durante las protestas en la ciudad de Esfahan tras el levantamiento provocado por la muerte de Mahsa Jina Amini el 16 de septiembre. Acusados de participar en el asesinato de tres funcionarios iraníes, fueron condenados a muerte y acusados de ‘moharebeh’ (enemistad contra Dios).

El alcance de la supuesta participación de los acusados en la muerte de los agentes de policía sigue siendo “muy incierto y cuestionable”, según explican los informes. Presuntamente, los agentes fueron asesinados por disparos, aunque los cargos contra los acusados no acusaban explícitamente de “asesinato”.

Los tres hombres apelaron el veredicto el 6 de mayo de 2023, pero el Tribunal Supremo confirmó sus sentencias de muerte, a pesar de que había una solicitud de revisión judicial pendiente. El 17 de mayo llamaron a sus familias para que los visitaran y las autoridades penitenciarias les dijeron que esta sería la reunión final.

“La pena de muerte es una violación del derecho a la vida y el máximo castigo cruel, inhumano y degradante”, han denunciado los expertos de lo ONU. “Nos sorprende que las autoridades hayan seguido adelante con las ejecuciones a pesar de la revisión judicial pendiente”, han añadido.

Según los informes a los que ha accedido la organización, se han llevado a cabo al menos 259 ejecuciones en Irán desde el 1 de enero, la mayoría por delitos relacionados con las drogas y entre ellas un número desproporcionado de minorías. “Se desconoce el número exacto de ejecuciones debido a la falta de transparencia del Gobierno, y es probable que la cifra sea mayor”.