La Policía Judicial de Portugal comenzará este martes a examinar una zona del sur cercana al lugar donde desapareció hace 16 años la niña británica Madeleine McCann, después de que así lo pidieran las autoridades de Alemania, que señalaron como sospechoso a Christian Brueckner, encarcelado por otros delitos.

Oficiales de la Policía Judicial de Portugal en el sitio de un depósito remoto donde se llevará a cabo una nueva búsqueda del cuerpo de Madeleine McCann, en Silves, Portugal. Foto: Reuters

Efectivos alemanes y británicos participan en este nuevo rastreo, que tiene como foco las inmediaciones de la presa de Arade y durará entre dos y tres días, según fuentes policiales citadas por la agencia Lusa. Este enclave está situado a unos 50 kilómetros de Praia da Luz, el lugar en el que se pierde la pista a la pequeña, de tres años, que se encontraba junto a su familia de vacaciones en el Algarve.

Brueckner, de 45 años, tiene pendiente también otro juicio por delitos sexuales perpetrados supuestamente entre 2000 y 2017, aunque la Fiscalía de Alemania aclaró que estas acusaciones no guardan relación con la desaparición aún sin esclarecer de Madeleine McCann, conocida como “Maddie” por su familia.