La tarde de este martes, el ministro de Educación, Nicolás Cataldo, presentó los ejes de trabajo y los desafíos de su cartera ante la comisión de Educación de la Cámara de Diputados.
Al inicio de su intervención, el secretario de Estado reconoció que en sus primeros días a la cabeza del ministerio se ha dedicado a “preparar la ejecución presupuestaria y a abordar conflictos”.
Asimismo, antes de pasar a detallar los planes que impulsarán desde la secretaría de Educación, reconoció que en el país “tenemos un déficit de aprendizaje como resultado de la pandemia, que no es privativo de Chile, es mundial”.
En primer lugar, Cataldo presentó los cinco ejes del trabajo legislativo de la cartera, que incluye mejoras a la nueva educación pública, modernización en los tres niveles (parvulario, escolar y universitario), fortalecimiento docente, bienestar y convivencia en espacios educativos y financiamiento de la educación.
Sobre este último punto, el ministro dijo que, dado su trabajo en la materia, “entiendo que hay un acuerdo transversal sobre que hay modificar el sistema de financiamiento” y que “el financiamiento es clave, porque es ahí donde se producen las brechas”.
“Mi reflexión, habiendo sido subsecretario, y habiéndome reunido con muchos alcaldes, y por el intercambio con parlamentarios, de oficialismo y de oposición, es que hay un consenso en que el financiamiento actual no da, y que no se trata de tener más plata, sino de reorganizar el gasto”.
Respecto al fortalecimiento docente, Cataldo planteó que “el desafío nacional es no quedarnos sin profesores en un corto tiempo”.
Por otra parte, en cuanto a la convivencia en espacios educativos, enfatizó que “tenemos que generar los marcos para el entendimiento de las comunidades educativas”.
Luego, el secretario de Estado entregó detalles sobre el plan de reactivación educativa, cuyo objetivo es impulsar una respuesta integral y estratégica en esta materia.
El plan se basa en tres ejes: convivencia y salud mental, fortalecimiento de aprendizajes, y asistencia y revinculación.
Entre los objetivos está reducir un 10% la tasa de ausentismo docente, alcanzando una tasa de 34%; alcanzar una revinculación anual promedio de 45% de estudiantes, de entre 6 y 21 años; aumentar la tasa de permanencia a un 96,6%, y recuperar el promedio de asistencia de estudiantes a niveles previos a la pandemia, pasando de 83% a 89% el 2025.
Cataldo apuntó a que estas tareas exceden a los gobiernos: “Los desafíos de educación deben tener una perspectiva de Estado”.
En concreto, planteó que más allá de las diferencias con otros sectores políticos, “lo importante es la voluntad, si hay voluntad de poner a los niños primero vamos a poder avanzar”.
Cataldo recibió parabienes por su llegada al ministerio, de parte de los diputados de la comisión y también del presidente del Colegio de Profesores, Carlos Díaz, que se conectó de manera telemática.
Aunque también hubo una solicitud, de parte del diputado Sergio Bobadilla (UDI), a raíz de una entrevista reciente a Cataldo: “Como usted nos ha pedido por los medios que no se convierta al ministerio en una trinchera, yo le pido que no convierta en trinchera ideológica el Mineduc”.