Esta mañana, el fiscal Francisco Lanas, de la zona Oriente, entregó detalles de la detención de los dos imputados por el ataque a la enfermera Pola Andrea Álvarez Cortés (32), quien fue apuñalada once veces a la salida de su trabajo, la Clínica Cordillera, en Las Condes, el domingo.

Fue durante la noche de este martes que Enrique Alejandro Hanson González y su pareja Patricia Isabel Henríquez Cortez fueron aprehendidos por la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones. El fiscal señaló que fueron detenidos en sus respectivos domicilios, ubicados en Puente Alto y Ñuñoa. En uno ellos, se ubicó la moto utilizada en el frustrado crimen, que pertenecería a la mujer, pero que se encontraba en poder del sujeto. Los acusados buscaron ocultar la moto para no ser hallada, debido a que quedó registrada en las cámaras de la comuna. “Fue adulterada con plásticos adhesivos, los que también fueron encontrados en un domicilio”, dijo el persecutor.

El jefe de la Brigada de Homicidios Metropolitana, Víctor Ruiz, afirmó que la moto “cuando es empleada en la comisión del delito, se le genera una alteración, cubriéndola con algunos elementos importantes que le cambian el color. En el sitio del suceso se ve una motocicleta de un color, pero establecimos después que correspondía a la original”.

“Esta persona, sobre seguro, la espera y la sigue una vez que sale del trabajo. Tenemos registros importantes, que no puedo detallar, pero que tienen que ver con comunicaciones que nos avalarían que él sabía la hora y el camino que ella iba a seguir hasta su domicilio, la aborda y causa diversas lesiones, incluso algunas de ellas mortales”, dijo el prefecto Víctor Ruiz.

Respecto al móvil del ataque, se trataría de rencillas anteriores. “Lo que hemos podido determinar hasta el día de hoy son rencillas anteriores entre la mujer detenida y la víctima de la presente causa. Lo que se planteará en la audiencia es que hay una planificación previa, por eso la premeditación, que es la calificante del homicidio”, dijo el fiscal.

El hombre atacó a la enfermera previa coordinación con su pareja, afirmó el fiscal. De esta forma, se descartó el sicariato, lo que fue planteado en una primera instancia por la familia de la víctima.

Los imputados guardaron silencio al momento de ser detenidos. No tienen antecedentes penales.

Respecto a las penas del homicidio calificado, esta parte de 15 años y un día de cárcel hasta presido perpetuo simple. Pero al ser frustrado, parte de 10 años y un día a 15 años tras las rejas.

“Recibimos con mucha esperanza de justicia la detención de estos dos imputados. Justicia para Pola, su familia, sus hijos y sus padres. Y también para darle tranquilidad a los vecinos de la comuna y todos los chilenos. Este fue un caso que nos conmocionó a nivel país”, dijo por su parte la alcaldesa de Las Condes, Daniela Peñalosa. Las cámaras de la comuna fueron clave para dar con el paradero de los imputados.

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