Medidas para la PSU: cambio de sedes, locales excluidos y vigilancia prioritaria

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A horas de la rendición del examen, Carabineros entregó al Demre sus recomendaciones para evitar incidentes. Llamado a interrumpir la prueba enfrenta a estudiantes secundarios agrupados en la Aces, Cones y "No Más PSU".


Las recomendaciones que en las últimas horas entregó Carabineros al Departamento de Evaluación, Medición y Registro Educacional (Demre) de la U. de Chile, apuntan a un objetivo específico: evitar la interrupción y "funas" que puedan entorpecer la Prueba de Selección Universitaria (PSU), que se realizará el 6 y 7 de enero.

Fuentes de gobierno señalan que entre las medidas de seguridad propuestas por la policía uniformada estaba excluir a 15 recintos de rendición de la prueba, debido a que no se podría garantizar su resguardo; la "protección a distancia" de 51 locales "vulnerables", 14 de los cuales se encuentran en la Región Metropolitana.

En total, el Demre había habilitado 659 sedes a nivel nacional para tomar el test de ingreso a la educación superior, en la cual se habían inscrito 297.437 personas, el mayor número desde 2003. Para resguardar el normal desarrollo de la prueba, en tanto, Carabineros había dispuesto de 4.000 efectivos a nivel país.

Según el organismo a cargos de la PSU, entre la fecha inicial de la prueba -que se realizaría el 18 y 19 de noviembre- y esta tercera fecha de rendición del test, cambiaron cerca de 50 locales, debido a que muchos colegios no estaban disponibles en enero por el cierre de sus sostenedores, la capacitación a profesores, entre otros motivos, aseguran.

Un requisito que consideró el Demre para escoger locales donde se realizará la PSU es que no hayan tenido un "historial de movilizaciones" recientes. Es por esta razón que, pese al aumento de inscritos, este año no se consideraron recintos como el Instituto Nacional y el Liceo 7 de Santiago.

Por comuna, las sedes de rendición que más aumentaron la cantidad de inscritos fueron las de Viña del Mar, Coquimbo y Valparaíso, que sumaron más de 280 nuevos estudiantes cada una. Así, en la Región de Valparaíso, las gobernaciones de Marga Marga y Valparaíso solicitaron aumentar medidas de seguridad. Además, se abrió una nueva sede en El Quisco.

En tanto, las comunas que más perdieron inscritos fueron las de Maipú (313 menos) y Santiago (202 menos).

La estrategia escolar

En medio de la incertidumbre por posibles protestas, ayer los escolares de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Aces) reafirmaron el llamado a impedir la realización de la prueba.

Víctor Chanfreau, vocero de la organización, dijo que planificarán movilizaciones en todo el país, con estudiantes que darán la PSU y, por lo tanto, ingresarán y protestarán en su local de examen: "Los estudiantes secundarios en ciertos colegios no vamos a permitir que se realice la prueba. Vamos a buscar la manera en la que esto sea posible, pero tenemos claro que no vamos a permitir el normal funcionamiento de esta prueba".

Sin embargo, esta postura no es unitaria entre los escolares. Ayer, el vocero de la coordinadora No más PSU, Miguel Ángel Arancibia, explicó que ellos llamaron a que cada joven se manifieste durante la PSU, en contra de esta prueba, pero sin impedir su realización: "No vamos a boicotear la PSU, porque ahí se juega la oportunidad de muchos estudiantes que pagaron por un preuniversitario para prepararse, sobre todo los de familias más pobres. La nuestra es una crítica a la PSU y al sistema educativo".

Por su parte, la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones) se sumó a esa postura. "El cambio debe ser para el conjunto del sistema educativo, incluyendo la PSU", dice su vocera, Valentina Miranda.

El llamado a boicotear la prueba genera rechazo entre miembros de la centroizquierda política. Uno de ellos fue el exsenador DC Ignacio Walker, quien publicó en sus redes sociales que "15 jóvenes de la Aces quieren impedir que 297.000 jóvenes den la PSU y la prensa les da cobertura nacional, yo digo que estamos completamente locos!".

Postura similar mostró el economista de Convergencia Social Nicolás Grau, quien planteó que "ojalá no se concrete boicot a toma de PSU. Sería una pelea entre estudiantes que nada va a ayudar a la lucha social".

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