Ministro Figueroa valora disminución de brecha en PDT y dice que se debe revisar “comportamiento de los colegios en el sistema escolar y cuánto se inflan las notas o no”

Este miércoles, el ministro de Educación, Raúl Figueroa, se refirió en radio Duna a la comentada disminución de la brecha que existe entre colegios científicos humanistas y técnicos profesionales, luego de la publicación de los resultados de la Prueba de Transición (PDT).

Las diferencias se logran evidenciar a través de un promedio de los puntos obtenidos en las cuatro pruebas. Por ejemplo, en Comprensión Lectora de 2021, diferencia entre establecimientos fue de 81 puntos y este año fue de 75 puntos. En Matemática en 2021 fue de 80 puntos y en el 2022 de 71 puntos. En la prueba de Historia y Ciencias Sociales, en 2021 se registraron 73 puntos y este año de 69. En Ciencias, el 2021 resultó en 90 puntos de diferencia y en 2022 en 83.

Respecto a las cifras de la última PDT, el ministro dijo que “son varios factores, las modificaciones que se han ido incorporando en esta transición apuntan en esa dirección (…). En un contexto de pandemia, en el que toda la evidencia muestra que las brechas educativas tienen que ampliarse, el hecho de que la prueba de transición no haya reflejado una ampliación de esas brechas es una muy buena noticia”.

“Tomamos una serie de medidas para que el coronavirus no afectara a los alumnos tan fuertemente en este proceso de rendición. Por ejemplo, la priorización curricular y adecuar los temarios de las pruebas para que todos pudiesen entrar a darla en las mismas relativas condiciones y eso también es muy positivo”, agregó Figueroa.

Durante el proceso de selección de 2020, las Notas de Enseñanza Media (NEM) promedió 542 puntos a nivel país, el que este año ascendió a 591. Luego de conocer los resultados de la última PDT, se evidenció que el promedio de notas NEM subió un 9% en la pandemia.

Sobre el uso del Ranking y las notas NEM, el ministro señaló que es importante “un debate más profundo que tiene que ver con la elaboración de ese ranking -esto lo hizo el consejo de rectores 10 años atrás- que tiene ciertas dificultades porque el ranking incita una inflación de notas y durante la pandemia hemos visto también como en general ha habido una inflación”.

“Creo que ahí hay un desafío pendiente (…). Hasta ahora hemos concentrado los esfuerzos en modificar las preguntas, probablemente hay que hacer a futuro un análisis de cómo se va a tratar lo del NEM y el ranking, pero, además, hay un tema concreto, el comportamiento de los colegios en el sistema escolar y cuánto se inflan las notas o no, las notas para beneficiar o no a los alumnos y eso es algo que hay que revisar porque se pueden generar -desde ese punto de vista- una serie de inequidades que habría que corregir”, concluyó Figueroa.